Enlace permanente Enviado por Ramiro Valdivia H (no verificado) el Mar, 08/25/2020 - 12:31
Cuando, por ejemplo, una actividad de restauración ecológica es realizada y eso beneficia a un tercero, resulta de toda justicia una retribución de parte del último. Esto en el mundo andino da lugar al Ayni, donde es ético recibir una retribución de igual forma, vale decir trabajo x trabajo, productos x productos, etc. con equidad
Cuando la retribución entra en los mecanismos del mercado, la retribución se convierte en pago y se establece una relación desigual, laboral, donde unos realizan trabajo que incrementa el bien común, y los otros usan el dinero (recurso de los ociosos) para transferir beneficios monetarios supuestos que, lastimosamente pasan por tener que valorar y negociar un precio, con lo cual la retribución nunca es igual a la contribución, son de distinta clase, unos ecológicos que se traducen en aumento de naturaleza; se intercambian por recursos financieros, moneda, economía.
La ley de los Merese esta dada varios años ya, es de carácter mercantilista y por supuesta la inequidad arriba manifiesta, traba su pleno ejercicio, también es innegable que hay serios ejemplos y avances en lo procesos de negociación, los ritmos son insufriblemente lentos e insuficientes para atender la crisis ambiental con la premura necesaria.
Una manera simple de superar el impase sería lograr que en las negociaciones o acuerdos entre contribuyentes y retribuyentes, las cuestiones financieras se traten de manera independiente, en tanto que la valoración ecológica = energética, de los ecosistemas y sus servicios ambientales, fuera compensada con valores ecológicos similares , vale decir por ejemplo sistemas de energía renovables, sistemas de salud o educación requeridos por los contribuyentes, que faciliten los retribuyentes, vale decir retribuir servicios por servicios, y no por dinero
Cuando, por ejemplo, una
Cuando, por ejemplo, una actividad de restauración ecológica es realizada y eso beneficia a un tercero, resulta de toda justicia una retribución de parte del último. Esto en el mundo andino da lugar al Ayni, donde es ético recibir una retribución de igual forma, vale decir trabajo x trabajo, productos x productos, etc. con equidad
Cuando la retribución entra en los mecanismos del mercado, la retribución se convierte en pago y se establece una relación desigual, laboral, donde unos realizan trabajo que incrementa el bien común, y los otros usan el dinero (recurso de los ociosos) para transferir beneficios monetarios supuestos que, lastimosamente pasan por tener que valorar y negociar un precio, con lo cual la retribución nunca es igual a la contribución, son de distinta clase, unos ecológicos que se traducen en aumento de naturaleza; se intercambian por recursos financieros, moneda, economía.
La ley de los Merese esta dada varios años ya, es de carácter mercantilista y por supuesta la inequidad arriba manifiesta, traba su pleno ejercicio, también es innegable que hay serios ejemplos y avances en lo procesos de negociación, los ritmos son insufriblemente lentos e insuficientes para atender la crisis ambiental con la premura necesaria.
Una manera simple de superar el impase sería lograr que en las negociaciones o acuerdos entre contribuyentes y retribuyentes, las cuestiones financieras se traten de manera independiente, en tanto que la valoración ecológica = energética, de los ecosistemas y sus servicios ambientales, fuera compensada con valores ecológicos similares , vale decir por ejemplo sistemas de energía renovables, sistemas de salud o educación requeridos por los contribuyentes, que faciliten los retribuyentes, vale decir retribuir servicios por servicios, y no por dinero