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Nosotros los pueblos indígenas somos testigos de cómo se negocia no sólo con nuestras riquezas sino también con nuestras conciencias y dignidad. Hay extranjeros y criollos como esos dos corruptos (polaco y japonés) que se han hecho del poder político acudiendo a artimañas y comprando conciencias de muchos que hoy los apoyan. Nos toman desprevenidos. Nos cuentan cuentos y juegan con nuestras necesidades para petrificarse en el poder. Ahora toda la mafia japonesa está feliz por haber logrado otra vez mediante manipulación la libertad del cabecilla cuya prisión era una forma de recuperar algo de dignidad que nos había robado. Pero a partir de hoy lo veremos constantemente en los medios haciendo posible la elección, si no es de él mismo, de su hijo/hija igual de ladrones como él. Pero nuestro gran problema es que los peruanos caemos fácilmente en la trampa y los aceptamos como nuestros líderes cuando no han hecho nada para ganérselo..
Cuándo despertaremos, cuando volverá el orden, cuándo tendremos un país digno y cuándo recuperaremos nuestra propia dignidad?