Desde el confín de los milenios renace el mito a cada paso y en cada nueva era, (esta para muchos es la de acuario) , pero no solo representa una cuestión de cambio por el cambio mismo, La Serpiente; antigua referente de las culturas tanto precolombinas como indoarias, se hace una con la historia del hombre y lo hace protagonista atento a su propio destino
Parte I
Origen de las cosas
El agua y la serpiente: del los presocráticos a los aztecas
Para acceder a los principios del conocimiento filosófico debemos remontarnos al pasado y de esta forma conocer lo que se pensó primero. Para llegar: estudiando, relacionando, analizando, mediante métodos de estudio y análisis, a algunas concepciones que pretenderemos defender como propias. En ese camino estamos.
Mi inquietud y primer intento en relacionar dos culturas diferentes, en apariencia, Grecia y la cultura Azteca, se produce porque representa ésta ultima, parte de mi identidad. Ya que pertenezco a la descendencia de aborígenes.
Trataré de girar, con algunas herramientas histórico literarias, y ver el principios de las cosas y el mundo desde dos miradas, que tal vez, no sean a mi escaso entendimiento tan distintas; En un esfuerzo, que pretende ser, sintético evidenciaré semejanzas.
El eje de este pequeño intento, lo mostraré tomando un solo elemento: El agua, y lo relacionaré con La Serpiente, ya que creo que éste símbolo mítico a servido para encarnar tanto el bien, como el mal, el placer carnal y la sabiduría acética. Desde los inicios el hombre transformó a éste animal en algo enigmático y mistérico, “todo gira, como la serpiente enroscada”.
Los presocráticos, para explicar de qué estaban hechas las cosas no dejan dos enunciados: 1)Todo está hecho de agua, principio natural 2) Todo está lleno de dioses. Luego también involucran al aire, al fuego, a la guerra y al logos, (del cual no aré ninguna interpretación mas que la aprendida), éste ultimo como palabra.
El agua: es de lo que están hechas las cosas, por los diferentes estados que ésta puede tener, el aire: también está en todo pero es más sutil, la guerra: es la tensión entre los contrarios y su equilibrio permanente por esta misma tensión. A esta división se la llama expositiva.
Pero no fueron los únicos que en los inicios hicieron esta división:
“La gran “piedra del calendario” erigida en Tenochtitlán durante el reinado de Axayácatl, nos revela, mediante jeroglíficos esculpidos, la concepción azteca del origen del mundo [o de las cosas]. Vemos allí la representación de las cuatro edades que, según pensaban los aztecas, precedieron a nuestra era y se desvanecieron por los efectos de sucesivos cataclismos. La primera, precedida por Tezcatlipoca, se llama 4 jaguar; los hombres y los gigantes de ésta época fueron devorados por jaguares mientras Tezcatlipoca convertíase en sol. La segunda, 4 viento, que tenía por jefe a Quetzalcoal, resultó destruida por las tempestades y los hombres e transformaron en monos. Tlaloc, dirigía la tercera, 4 lluvia, que desapareció por obra del fuego. Chalchiuthlicue, era la diosa del agua, presidía la cuarta edad que se desvaneció al producirse un diluvio y sus hombres se metamorfosearon en peses. Nuestro mundo, llamado 4 movimiento, habría de ser destruido a su vez por temblores de tierra con lo cual el sol nos controla, Tonatiuh, desaparecería”. “El universo azteca estaba dividido en el plano horizontal y verticalmente(1)”
Me pregunto esto, ¿las cuatro edades no se asemejan de alguna manera a las cuatro elementos metafóricos de los presocráticos? ¿el concepto de universo, no se parece, y excediendo el límite del análisis, al mundo sensible y al supra sensible? Para responder en algo a esta pregunta observemos lo siguiente:
“La división horizontal, comprendía cinco direcciones: los cuatro puntos cardinales y el centro, cada una de ellas gobernadas por un dios. (2)” ¿Acaso el mundo de las ideas no era el lugar de los dioses? Pero hay mas:
“La división vertical distinguía trece mundos superiores y nueve inferiores. (3)” En un sentido explicativo de jerarquía y elevación hacia lo perfecto, éste autor sigue hablando de quienes habitaban esos mundos y refiere dos cosas importantes, “los dioses y el Creador... en el cielo mas alto[entre otros]” y termina diciendo en ese párrafo:
“Todos los otros muertos iban al Mictlán, el mundo inferior, que nada equivale al infierno cristiano (4)”
Creo que las similitudes son claras, ¿no eran 9, las vidas pero había una superior, la del filósofo la cual tenía que ser vivida tres veces, para llegar a lo excelso mundo de la perfección? ¿Grecia y en particular Atenas, no sufren una decadencia? Hay una verdad concreta la caída de gracia no es la misma que la del imperio Azteca, pero es caída al fin.
A unos los conquistaron, dominaron y desnaturalizaron; Y a los Griegos ¿no?. Unos confundieron a Cortés con la “blanca serpiente emplumada”, Quetzalcoal, perecieron por lo que creían era su dios blanco, los otros fueron absorbidos por los imperios occidentales (macedonio y romano) que se expandían por todo el mundo. Tanto de uno como de otros, no es simple, ni sencillo, saber realmente en qué pensaban.
Pero dejo esta, sí sencilla historia:
“Dios le dijo [a la serpiente] : - Pasarán tres piraguas por el río. En dos de ellas, viajará la muerte. Si no te equivocas, te liberaré de la vida breve. La serpiente dejó pasar a la primera piragua, que venía cargada de cestos de carne podrida. Tampoco hizo caso de la segunda, que estaba llena de gente. Cuando llegó la tercera, que parecía vacía, le dio la bienvenida. Por eso es inmortal la serpiente en la región de shipaiá. Cada vez que envejece, Dios le regala una piel nueva. (5)”
Tal vez debamos a animarnos a elegir continuamente alguna de estas tres piraguas.
Manuel Valentín Coria
Profesor de Filosofía y Ccias. De la Educación
Referencias:
1,2,3,4: Las culturas precolombinas, Henri Lehman, trad. Mariana Pairó de Bonafini, EUDEBA, 1958,Bs As. Argentina.
5: Los nacimientos, 25°edición (3ra reimpresión) 1989. Argentina
Desde el confín de los milenios renace el mito a cada paso y en cada nueva era, (esta para muchos es la de acuario) , pero no solo representa una cuestión de cambio por el cambio mismo, La Serpiente; antigua referente de las culturas tanto precolombinas como indoarias, se hace una con la historia del hombre y lo hace protagonista atento a su propio destino
Parte I
Origen de las cosas
El agua y la serpiente: del los presocráticos a los aztecas
Para acceder a los principios del conocimiento filosófico debemos remontarnos al pasado y de esta forma conocer lo que se pensó primero. Para llegar: estudiando, relacionando, analizando, mediante métodos de estudio y análisis, a algunas concepciones que pretenderemos defender como propias. En ese camino estamos.
Mi inquietud y primer intento en relacionar dos culturas diferentes, en apariencia, Grecia y la cultura Azteca, se produce porque representa ésta ultima, parte de mi identidad. Ya que pertenezco a la descendencia de aborígenes.
Trataré de girar, con algunas herramientas histórico literarias, y ver el principios de las cosas y el mundo desde dos miradas, que tal vez, no sean a mi escaso entendimiento tan distintas; En un esfuerzo, que pretende ser, sintético evidenciaré semejanzas.
El eje de este pequeño intento, lo mostraré tomando un solo elemento: El agua, y lo relacionaré con La Serpiente, ya que creo que éste símbolo mítico a servido para encarnar tanto el bien, como el mal, el placer carnal y la sabiduría acética. Desde los inicios el hombre transformó a éste animal en algo enigmático y mistérico, “todo gira, como la serpiente enroscada”.
Los presocráticos, para explicar de qué estaban hechas las cosas no dejan dos enunciados: 1)Todo está hecho de agua, principio natural 2) Todo está lleno de dioses. Luego también involucran al aire, al fuego, a la guerra y al logos, (del cual no aré ninguna interpretación mas que la aprendida), éste ultimo como palabra.
El agua: es de lo que están hechas las cosas, por los diferentes estados que ésta puede tener, el aire: también está en todo pero es más sutil, la guerra: es la tensión entre los contrarios y su equilibrio permanente por esta misma tensión. A esta división se la llama expositiva.
Pero no fueron los únicos que en los inicios hicieron esta división:
“La gran “piedra del calendario” erigida en Tenochtitlán durante el reinado de Axayácatl, nos revela, mediante jeroglíficos esculpidos, la concepción azteca del origen del mundo [o de las cosas]. Vemos allí la representación de las cuatro edades que, según pensaban los aztecas, precedieron a nuestra era y se desvanecieron por los efectos de sucesivos cataclismos. La primera, precedida por Tezcatlipoca, se llama 4 jaguar; los hombres y los gigantes de ésta época fueron devorados por jaguares mientras Tezcatlipoca convertíase en sol. La segunda, 4 viento, que tenía por jefe a Quetzalcoal, resultó destruida por las tempestades y los hombres e transformaron en monos. Tlaloc, dirigía la tercera, 4 lluvia, que desapareció por obra del fuego. Chalchiuthlicue, era la diosa del agua, presidía la cuarta edad que se desvaneció al producirse un diluvio y sus hombres se metamorfosearon en peses. Nuestro mundo, llamado 4 movimiento, habría de ser destruido a su vez por temblores de tierra con lo cual el sol nos controla, Tonatiuh, desaparecería”. “El universo azteca estaba dividido en el plano horizontal y verticalmente(1)”
Me pregunto esto, ¿las cuatro edades no se asemejan de alguna manera a las cuatro elementos metafóricos de los presocráticos? ¿el concepto de universo, no se parece, y excediendo el límite del análisis, al mundo sensible y al supra sensible? Para responder en algo a esta pregunta observemos lo siguiente:
“La división horizontal, comprendía cinco direcciones: los cuatro puntos cardinales y el centro, cada una de ellas gobernadas por un dios. (2)” ¿Acaso el mundo de las ideas no era el lugar de los dioses? Pero hay mas:
“La división vertical distinguía trece mundos superiores y nueve inferiores. (3)” En un sentido explicativo de jerarquía y elevación hacia lo perfecto, éste autor sigue hablando de quienes habitaban esos mundos y refiere dos cosas importantes, “los dioses y el Creador... en el cielo mas alto[entre otros]” y termina diciendo en ese párrafo:
“Todos los otros muertos iban al Mictlán, el mundo inferior, que nada equivale al infierno cristiano (4)”
Creo que las similitudes son claras, ¿no eran 9, las vidas pero había una superior, la del filósofo la cual tenía que ser vivida tres veces, para llegar a lo excelso mundo de la perfección? ¿Grecia y en particular Atenas, no sufren una decadencia? Hay una verdad concreta la caída de gracia no es la misma que la del imperio Azteca, pero es caída al fin.
A unos los conquistaron, dominaron y desnaturalizaron; Y a los Griegos ¿no?. Unos confundieron a Cortés con la “blanca serpiente emplumada”, Quetzalcoal, perecieron por lo que creían era su dios blanco, los otros fueron absorbidos por los imperios occidentales (macedonio y romano) que se expandían por todo el mundo. Tanto de uno como de otros, no es simple, ni sencillo, saber realmente en qué pensaban.
Pero dejo esta, sí sencilla historia:
“Dios le dijo [a la serpiente] : - Pasarán tres piraguas por el río. En dos de ellas, viajará la muerte. Si no te equivocas, te liberaré de la vida breve. La serpiente dejó pasar a la primera piragua, que venía cargada de cestos de carne podrida. Tampoco hizo caso de la segunda, que estaba llena de gente. Cuando llegó la tercera, que parecía vacía, le dio la bienvenida. Por eso es inmortal la serpiente en la región de shipaiá. Cada vez que envejece, Dios le regala una piel nueva. (5)”
Tal vez debamos a animarnos a elegir continuamente alguna de estas tres piraguas.
Manuel Valentín Coria
Profesor de Filosofía y Ccias. De la Educación
Referencias:
1,2,3,4: Las culturas precolombinas, Henri Lehman, trad. Mariana Pairó de Bonafini, EUDEBA, 1958,Bs As. Argentina.
5: Los nacimientos, 25°edición (3ra reimpresión) 1989. Argentina