Este es grave incidente que se origina por la lenidad y el complicidad de los gobiernos para empujar a los maderedos y depredadores del bosque tropical a ocupar territorios de reservas indigenas, territorios ancestrales que constituyen bancos de germoplasma para todo el ecosistema del bosque tropical. No es el primer caso que los asesinatos imperan en estos territorios, no cabe duda que ahora que el aparato estatal represivo actuara como siempre con los depredadores y traficantes de oro y madera, por esa razon tanto AIDESEP como las otras organizaciones deben ponerse las pilas para proteger la vida y naturaleza de nuestros pueblos indigenas.
Este es grave incidente que se origina por la lenidad y el complicidad de los gobiernos para empujar a los maderedos y depredadores del bosque tropical a ocupar territorios de reservas indigenas, territorios ancestrales que constituyen bancos de germoplasma para todo el ecosistema del bosque tropical. No es el primer caso que los asesinatos imperan en estos territorios, no cabe duda que ahora que el aparato estatal represivo actuara como siempre con los depredadores y traficantes de oro y madera, por esa razon tanto AIDESEP como las otras organizaciones deben ponerse las pilas para proteger la vida y naturaleza de nuestros pueblos indigenas.