Señor Cabrejos: Cuando me preguntan sobre cuál ha sido en mi opinión el mejor gobierno peruano, contesto: "El menos malo es el que me deportó", refiriéndome a Velasco. Yo creo que fue un gobierno nacionalista. Nacionalizó el petróleo, las minas, la pesca, además de dar la ley de Reforma Agraria. Pero ni yo ni la Confederación Campesina del Perú (CCP) fuimos acrÃticos, incondicionales, que es lo que él querÃa, por eso me prohibió salir de Lima y luego me deportó, por eso ilegalizó a la CCP, por eso ordenó la masacre de Huanta (a la que se refiere el huayno "Flor de Retama"), por eso reprimió al campesinado de Andahuaylas. Creó bajo sus órdenes la Confederación Nacional Agraria (CNA) a la que dotó de locales y dirigentes a sueldo. Su reforma agraria fue vertical, nosotros luchábamos por una RA horizontal. Opinábamos que eran los propios campesinos quienes determinaran si la tierra debiera parcelarse, o ser comunidad, o ser cooperativa. Precisamente en el primer perÃodo de GarcÃa tuve la suerte de participar en la oleada de tomas de tierras de las SAIS creadas por Velasco en Puno. Las tomas de tierras las organizaron las comunidades indÃgenas contra las SAIS velasquistas defendidas por la policÃa y el ejército de Alan GarcÃa, contra la CNA velasquista y contra Sendero Luminoso que mató muchos magnÃficos dirigentes de las tomas de tierra acusándolos de "traidores al campesinado porque le dicen que hay otra forma de lucha que no es la lucha armada". En esa lucha recuperamos centenares de hectáreas para los "ayllus" que son sus verdaderos dueños desde antes de la invasión europea. Desgraciadamente el horror de Velasco por la democracia (no me refiero a eso que ahora existe donde un candidato promete maravillas que al dÃa siguiente de tomar el poder incumple y hay que esperar 5 años para cambiarlo, hablo de la verdadera democracia que es hacer lo que la gente de abajo ordena), hizo que cuando el imperio norteamericano, sus cómplices y sirvientes impulsaron el golpe reaccionario de Morales, el pueblo no se levantó en defensa del gobierno de Velasco. Yo estaba deportado por él, no podÃa hacer nada para luchar contra el golpe imperialista como lo hice en Argentina en 1955 y en Chile en 1973. Ésta es en sÃntesis mi opinión sobre Velasco. Atentamente,
Hugo Blanco
Señor Cabrejos:
Cuando me preguntan sobre cuál ha sido en mi opinión el mejor gobierno peruano, contesto: "El menos malo es el que me deportó", refiriéndome a Velasco.
Yo creo que fue un gobierno nacionalista. Nacionalizó el petróleo, las minas, la pesca, además de dar la ley de Reforma Agraria.
Pero ni yo ni la Confederación Campesina del Perú (CCP) fuimos acrÃticos, incondicionales, que es lo que él querÃa, por eso me prohibió salir de Lima y luego me deportó, por eso ilegalizó a la CCP, por eso ordenó la masacre de Huanta (a la que se refiere el huayno "Flor de Retama"), por eso reprimió al campesinado de Andahuaylas. Creó bajo sus órdenes la Confederación Nacional Agraria (CNA) a la que dotó de locales y dirigentes a sueldo.
Su reforma agraria fue vertical, nosotros luchábamos por una RA horizontal. Opinábamos que eran los propios campesinos quienes determinaran si la tierra debiera parcelarse, o ser comunidad, o ser cooperativa. Precisamente en el primer perÃodo de GarcÃa tuve la suerte de participar en la oleada de tomas de tierras de las SAIS creadas por Velasco en Puno. Las tomas de tierras las organizaron las comunidades indÃgenas contra las SAIS velasquistas defendidas por la policÃa y el ejército de Alan GarcÃa, contra la CNA velasquista y contra Sendero Luminoso que mató muchos magnÃficos dirigentes de las tomas de tierra acusándolos de "traidores al campesinado porque le dicen que hay otra forma de lucha que no es la lucha armada". En esa lucha recuperamos centenares de hectáreas para los "ayllus" que son sus verdaderos dueños desde antes de la invasión europea.
Desgraciadamente el horror de Velasco por la democracia (no me refiero a eso que ahora existe donde un candidato promete maravillas que al dÃa siguiente de tomar el poder incumple y hay que esperar 5 años para cambiarlo, hablo de la verdadera democracia que es hacer lo que la gente de abajo ordena), hizo que cuando el imperio norteamericano, sus cómplices y sirvientes impulsaron el golpe reaccionario de Morales, el pueblo no se levantó en defensa del gobierno de Velasco. Yo estaba deportado por él, no podÃa hacer nada para luchar contra el golpe imperialista como lo hice en Argentina en 1955 y en Chile en 1973.
Ésta es en sÃntesis mi opinión sobre Velasco.
Atentamente,
Hugo Blanco