Restauración de ecosistemas: tema del Día Mundial del Ambiente

Servindi, 4 de junio, 2021.- El tema del Día Mundial del Medio Ambiente 2021 es la Restauración de los Ecosistemas un desafío esencial para prevenir la catástrofe climática, detener la creciente ola de contaminación y desechos, y frenar la pérdida de biodiversidad.

Los ecosistemas sustentan todas las formas de vida de la Tierra. De la salud de los ecosistemas depende directamente la salud de nuestro planeta y de todos sus habitantes.

Restaurar los ecosistemas significa favorecer la recuperación de aquellos ecosistemas que hayan sido degradados o destruidos, así como conservar los que todavía siguen intactos. 

Disponer de ecosistemas más saludables, con una biodiversidad más rica, aporta beneficios como suelos más fértiles, mayor disponibilidad de recursos como la madera o el pescado, y más reservas de gases de efecto invernadero.

La restauración de ecosistemas grandes y pequeños protege y mejora los medios de subsistencia de las personas que dependen de ellos.

También ayuda a controlar las enfermedades y reducir el riesgo de desastres naturales. De hecho, la restauración puede contribuir a la consecución de todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El Decenio

El 5 de junio Pakistán fungirá como anfitrión mundial del Día Mundial del Ambiente 2021, y este día será el marco para lanzar el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas.

El cita decenio tiene por objetivo prevenir, detener y revertir la degradación de los ecosistemas en todos los continentes y océanos.

De aquí a 2030, la restauración de 350 millones de hectáreas de ecosistemas terrestres y acuáticos degradados podría generar 9 billones de dólares estadounidenses en materia de servicios ecosistémicos.

La restauración también podría eliminar de la atmósfera de 13 a 26 gigatoneladas de gases de efecto invernadero.

Los beneficios económicos de estas intervenciones exceden en diez veces el costo de la inversión, mientras que el precio de la inacción es al menos tres veces mayor que el de la restauración de los ecosistemas.

¿En qué consiste la restauración de ecosistemas?

Devolver un ecosistema a su estado original no siempre es posible o deseable. Se pueden restaurar todo tipo de ecosistemas, incluidos los bosques, la tierra agrícola, las ciudades, los humedales y los océanos.

La restauración puede producirse de varias formas entre las que se cuentan, por ejemplo, plantar de forma activa o eliminar las presiones que afectan a la naturaleza para que pueda recuperarse por sí sola.

Casi cualquier persona puede poner en marcha iniciativas de restauración, desde gobiernos y organismos para el desarrollo hasta empresas, comunidades y particulares debido a que las causas de la degradación son numerosas y variadas, y pueden tener un impacto a diferentes escalas.

Por ejemplo, la degradación puede ser el producto de políticas nocivas como los subsidios para la agricultura intensiva o las leyes de tenencia poco restrictivas que fomentan la deforestación.

Los lagos y las costas pueden resultar contaminados por una mala gestión de los desechos o un accidente industrial. Las presiones comerciales pueden propiciar el desarrollo de pueblos y ciudades con demasiado asfalto y muy pocos espacios verdes.

La restauración de ecosistemas puede tomar muchas formas: plantar árboles, reverdecer ciudades, reintroducir especies silvestres en los jardines, cambiar la dieta o limpiar ríos y costas.

La generación actual es la que puede hacer las paces con la naturaleza y corregir el rumbo civilizatorio para proteger lo que queda y reparar lo que ha sido dañado.

Diversos organismos de las Naciones Unidas han elaborado para la ocasión un Manual de Restauración de Ecosistemas que puede ser descargado libremente para mayor información y difusión.

Descargar con un clic en el imagen o en el siguiente enlace:

• Manual de Restauración de Ecosistemas (Castellano, PDF, 21 páginas).