A las nueve de la mañana del día de hoy lunes 10 de diciembre las comunidades y rondas campesinas de Ayabaca dieron inicio a su marcha rumbo a la ciudad de Piura, luego de haberse concentrado previamente en el lugar denominado Chanuran, a veinte minutos de la localidad de Ayabaca.
En simultáneo, las rondas campesinas de veintiséis comunidades se pre concentraron para dirigirse a los puntos donde confluiría el mayor número de participantes.
Luego iniciaron la caminata hacia la localidad de Montero, donde otras comunidades y rondas campesinas de la provincia se concentrarán. Aproximadamente a la 3:00 p.m. de hoy reiniciarán la Marcha cuyo destino final es la ciudad de Piura.
Por la noche arribarán al distrito de Paimas, donde la población tiene previsto un cálido recibimiento popular a los marchantes. Este será el primer punto de reabastecimiento denominado Tambo de Paimas, donde compartirán alimentos y pernoctaran.
Así, desde cada rincón de la región Piura, las comunidades y rondas campesinas, de manera organizada irán recorriendo y concentrándose en diversos tambos, hasta concentrarse en la ciudad a Piura el sábado 15 del mes en curso, en una gran manifestación en defensa de la vida, el agua, la tierra y el agro.
Una exigencia particular de gran importancia es el reconocimiento y respeto de los resultados de la Consulta Vecinal realizada el 16 de septiembre en Ayabaca, Carmen de la Frontera y Pacaipampa, en la que el 94 por ciento de la población rechazó la presencia del proyecto Río Blanco, a cargo de la minera Majaz, en sus territorios.
Se trata de que el estado respete los derechos contemplados en el Convenio sobre Pueblos Indígenas N° 169 de la Organización Internacional del Trabajo y en especial el derecho de las comunidades y la población del alto Piura a elegir su propios Modelos de Desarrollo.
Fuente: Información enviada por CONACAMI. Más información: Teléfono 01 470 5854
Comentarios
Desde que el Estado no puede resolver los grandes problemas nacionales, la voz del pueblo se escucha en todos los rincones del paÃs.
Loable actitud de todos los integrantes de las comunidades que de una u otra manera ven perjudicado su hábitat por la explotación minera sin control.
El Estado debe demostrar con argumentos válidos que se explotará el cobre sin dañar el medio ambiente, entonces los pueblos de Ayabaca, Pacaipampa y Carmen de la Frontera, no estarán en contra del proyecto RÃo Blanco.
Pero al desconocer la voluntad de los pueblos involucrados, el Estado sigue siendo centralista y su gobierno toma las decisiones sin considerar a las poblaciones que por siglos han utilizado los recursos naturales libremente y excentos la de contaminación producida por la gran minerÃa de tajo abierto.
Ahora los grandes contaminadores se han rebautizado con el apelativo de «MINERIA LIMPIA», pero quien los controla, DIGESA? el Ministerio de Energia y Minas? INRENA?. Asà como controlan los impactos mineros producidos por Yanacocha en Cajamarca?
La contaminación del agua por la mineria «limpia» de Yanacocha originó el conflicto por el QUILISH, podrán las autoridades centralizadas preveer las consecuencias que este proyecto originará en el corto plazo en Piura. Parece que no.
Finalmente, invocamos al Estado a respetar los derechos contemplados en el Convenio sobre Pueblos IndÃgenas N° 169 de la Organización Internacional del Trabajo y en especial el derecho de las comunidades y la población del alto Piura a participar en la elección de su propio Modelo de Desarrollo.
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