Perú: ¿Qué haría Miguel Grau Seminario si estuviera entre nosotros?

Por Jorge Agurto*

Servindi, 11 de octubre, 2009.- El 8 de octubre es un día feriado en todo el Perú por el Combate de Angamos y la gesta de Miguel Grau. Lo que deseo es llamar la atención sobre la unión de ética y política en dicho personaje, elementos que son fundamentales para la renovación de la política y la construcción de un nuevo Perú (Imagen: Wikipedia).

Como lo reseña el audio producido por Servindi (leer o escuchar: Miguel Grau, ejemplo de integridad, honor y compromiso democrático), el insigne piurano es importante y debe ser revalorado no solo como héroe nacional o Caballero de los Mares. Lo que nos debe interesar es su mensaje de vida, esa coherencia de virtudes y conducta que lo convierte en un hombre-signo, un ícono que contribuye a enriquecer el acervo de nuestra peruanidad.

Vamos a destacar solo algunos elementos:

Consecuencia e integridad política. ¿Qué parlamentario(a) de hoy habría dejado su cómodo escaño en el Congreso de la República para asumir su deber militar de defender la patria aún a riesgo de perder la vida? como sucedió en el caso de Miguel Grau.

Miguel Grau lo hizo y siendo diputado por Paita, reasumió voluntariamente su condición de Comandante del Monitor Huáscar y en el cuaderno de Bitácora escribió:

"Os puedo asegurar que si el Huáscar no regresara victorioso, yo tampoco he de regresar.

Es decir su compromise político y militar fue hasta las últimas consecuencias. Nada de dudas, vacilaciones, transfuguismo, ni acomodo. Primero estaba la patria, luego la persona individual.

Demócrata a carta cabal. En 1872 cuando el coronel Tomás Gutiérrez, entonces Ministro de Guerra y Marina, y sus tres hermanos dieron un golpe contra el estado de derecho, Miguel Grau rechazó el gobierno de facto y enfrentó con resolución, de manera activa, la tiranía que se quería imponer.

Los hermanos Gutiérrez desconocieron la elección de Manuel Pardo, tomaron preso al entonces Presidente José Balta, disolvieron el Congreso y ordenaron el sometimiento de la Fuerza Armada. Grau y otros comandantes de buque no solo se pronunciaron públicamente en contra sino que se desplazaron hacia el sur a fin de promover la resistencia ciudadana.

Nacionalismo sin sujeción. Otro hecho importante de su biografía es cuando el gobierno peruano contrata en Estados Unidos al contralmirante norteamericano John R. Tucker como Jefe de la Escuadra peruana. Este hecho provocó que un grupo de marinos peruanos solicitara que el nombramiento de Tucker fuera revocado o en su defecto se accediera al relevo de sus puestos, pues colocar a un extranjero en dicho cargo significaba dudar de la lealtad y competencia de los peruanos.

Los opositores a la decisión del gobierno de Pardo fueron reemplazados y sometidos a juicio acusados de insubordinación, deserción y traición. El juicio duró seis meses, tiempo en el que Grau y sus compañeros estuvieron presos. Finalmente, fueron declarados inocentes, pero dejaron en limpio el honor profesional y la ética de los peruanos.

A pesar de sus medidas nacionalistas, Pardo buscaba atraer entonces la participación norteamericana, para enfrentar el capitalismo británico que dominaba el comercio con el Perú y que buscaba controlar todo el proceso económico. Pero Miguel Grau tenía muy claro que la lucha nacional no era para estar sujetos o tutelados a una u otra potencia econñomica extranjera.

Ni chauvinismo ni patrioterismo: Nacionalismo. Algunos desinformados podrían pensar que la Guerra del Pacífico fue para el Perú una guerra sin sentido, en la que no había nada que defender porque el Estado y el Ejércite no representaban (como hasta ahora) al Perú de las mayorías.

Ello es relativamente cierto pero es necesario explicarnos los hechos a partir de su contexto y situación histórica. Como lo destaca el historiador Wilfredo Kapsoli el gobierno de Manuel Pardo había iniciado una "audaz política nacionalista" para proteger al capital nacional del capitalismo inglés.

Con tal finalidad en 1875 decretó la expropiación y nacionalización de todos los recursos salitreros de Tarapacá y facultó al Ejecutivo a celebrar los contratos necesarios para hacer efectivas su explotación y comercialización en provecho del país.

"La política nacionalista del Perú, en desmedro del capital extranjero fue, pues, el factor desencadenante de la Guerra del Pacífico. Y fue Inglaterra el país que provocó directamente el conflicto a fin de apropiarse de la riqueza peruana. Para esto se utilizó a la burguesía chilena a la que le cupo el papel de mascarón de proa de la avanzada inglesa" (1)

Quiero dejar claro que mi propósito no es promover el nacionalismo como doctrina o ideología política. Únicamente es advertir de qué manera los diversos individuos, grupos y clases sociales asumen la defensa consecuente o no de los intereses colectivos de la nación peruana.

En aquellos momentos fue la defensa del guano y el salitre, sustancias "humildes y groseras", las que tuvieron un rol clave en la acumulación del capital y la formación de la República. Hoy quizás, el problema se presenta en la defensa de nuestros bosques, suelos, agua y otros recursos naturales o servicios esenciales. Lo importante es revalorar aquellos valores constructivos, aquellas actitudes positivas que enriquecen en el imaginario colectivo nuestra noción de patria e identidad nacional.

Luchador regional. Es conocida la intervención de Miguel Grau en la defensa de Paita, para evitar que sea recategorizada como distrito en desmedro de la calidad de provincia, que en ese momento ostentaba. Grau dijo:

"No sólo como representante de la provincia de Paita, sino como hijo de ella, creo mi deber, hacer uso de la palabra para defender su existencia.

Creo que no sea necesario alegar más razones de las que ha aducido la Comisión de Demarcación de esta Cámara, para combatir la idea de hacer de Paita, un distrito de Piura, sin embargo, manifestaré ligeramente a los Honorables Representantes, que la Provincia de Paita, por su condición de Puerto Mayor y por ser el primero en la ruta norte de la República, debe de continuar con la categoría de Provincia, en la que cuenta más de dieciocho años de existencia.

Además, todos sus distritos están perfectamente demarcados y por la naturaleza de puerto que tiene Paita necesita indispensablemente de una autoridad superior que pueda atender con oportunidad y acierto, las variadas exigencias del servicio.

Por estas ligeras razones que me he permitido exponer y otras que omito, porque están al alcance de mis honorables compañeros, espero muy fundadamente, que la Cámara desechará el proyecto remitido por el Gobierno, en la parte relativa a la supresión de la importante provincia que tengo el honor de representar" (2)

Un hombre honesto comprometido con su tiempo

En realidad son muchos los aspectos de la vida de Miguel Grau que despiertan la admiración de numerosos historiadores e intelectuales como Raúl Porras, Jorge Basadre y Fernando Romero, entre otros; y que Jorge Basdre resume magistralmente:

Miguel Grau Seminario fue un hombre comprometido con su tiempo, con su país y sus valores. Fue honesto y leal con sus principios, defendió el orden constitucional y fue enemigo de las dictaduras.

El héroe de Angamos siempre estuvo en la línea de afirmación de las normas morales y las tradiciones de la república. Honrado en el camarote y en la torre de mando, lo es también en el salón y en el hogar. (3)

El hemiciclo del Congreso del Perú conserva una réplica del escaño de Miguel Grau y su nombre es el primero que se llama al momento de pasar lista a los congresistas. Pero el recuerdo de Miguel Grau, más que un mueble o una llamada de lista, más que un día feriado para los trabajadores estatales, debe ser una fecha propicia para una reflexión profunda que confronte los valores de este hombre-signo de la nación peruana con los de los políticos de ahora, muchos de ellos sinvergüenzas de pacotilla, que se refocilan con la opinión pública y actúan motivados más por intereses minúsculos y mundanos antes que por los verdaderos intereses de la patria.

Por ejemplo, cabría preguntarse y hacer reflexionar a los escolares - que por estas fechas tradicionalmente dibujan y recitan poemas a Miguel Grau - ¿Qué haría Miguel Grau Seminario si estuviera hoy entre nosotros?:

• ¿Miguel Grau hubiera permitido en silencio la concesión irregular del puerto de Paita a favor de la empresa Terminales Portuarios Euroandinos (TPE) de propiedad de capitales chilenos como lo ha hecho el gobierno de Alan García?

• ¿Permitiría de manera pasiva que se recorte el presupuesto de los gobiernos locales para favorecer programas centralistas cuyo único afán es apuntalar una campaña política por el un partido que gobierna todo lo contrario a sus promesas electorales?

• ¿Permitiría que se continúe legislando con una Constitución Política espúrea e ilegítima?

• ¿Permanecería sentadito en su escaño mientras se aprueban normas que entregan nuestra riqueza biológica, recursos de hidrocarburos y patrimonio cultural en las condiciones más obsecuentes a favor de la inversión extranjera?

No lo creo. Soy de los que opinan que hombres con la integridad ética-política de Miguel Grau Seminario se habrían sublevado contra la ignonimia y estarían hoy en el primer lugar de la batalla política, luchando de manera consecuente, con integridad, nobleza y decencia.

Notas:

(1) Kapsoli Escudero, Wilfredo: Modernidad y Tradición. Perú, siglos XVI -XX, Editorial Lumen, 1996, p. 51.

(2) Paita Virtual: http://www.paitavirtual.com/1grau.html

(3) Wkipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Miguel_Grau

---

* Jorge Agurto es comunicador social autodidacta. Promotor del Servicio de Información Indígena Servindi y Preside Servicios en Comunicación Intercultural Servindi.

Algunos políticos de hoy... por Carlin (Fuente: Carlincaturas)