Servindi, 11 de julio d, 2009.- Roberto Cuéllar, director ejecutivo del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH), afirmó que "las democracias de hoy deben hacer un mayor esfuerzo de comprensión de la diversidad étnica" y que "lo ocurrido en Bagua Grande y Bagua Chica no es compatible con la democracia".
Cuéllar sostuvo en un mensaje público que los estados deben incluir "de una vez por todas la consulta libre e informada, ajustada a las costumbres vivientes y a los derechos de los pueblos indígenas de nuestra América".
Los principios rectores del derecho internacional de los derechos humanos tutelan como eje transversal el derecho a la consulta previa, libre e informada a las comunidades y autoridades indígenas tradicionales bajo sus propios mecanismos e instituciones y en sus idiomas milenarios, expresó.
Tales principios se han visto fortalecidos a partir de la entrada en vigor del Convenio 169 de la OIT, la aprobación de la Declaración de Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y la jurisprudencia del sistema interamericano de protección de los derechos humanos.
Todo Estado democrático de derecho debe cumplir de buena fe las obligaciones internacionales y el incumplimiento del derecho de consulta y participación en los procesos de toma de decisiones que los afectan "amenaza seriamente las culturas, formas de vida, tradiciones, instituciones y derecho propio de los pueblos indígenas " dijo.
El IIDH es una institución internacional autónoma de carácter académico. Fue creado en 1980 en virtud de un convenio suscrito entre la Corte Interamericana de Derechos Humanos y la República de Costa Rica.
El IIDH es considerado uno de los más importantes centros mundiales de enseñanza e investigación académica sobre derechos humanos, con un enfoque multidisciplinario y con énfasis en los problemas de América.
Mensaje del Director ejecutivo con motivo de los sucesos de Bagua, Perú
Por Roberto Cuéllar M.*
"Las democracias de hoy deben incluir la consulta libre e informada, ajustada a las costumbres vivientes y a los derechos de los pueblos indígenas de nuestra América"
San José, Costa Rica, 25 de junio de 2009. Perú está de luto porque el 5 de junio se violaron muy gravemente los derechos humanos de las comunidades amazónicas de Bagua Grande y Bagua Chica y de miembros de la Policía Nacional del Perú en un enfrentamiento en el que fueron muertas más de 30 personas de uno y otro lado, como lo informara la Defensoría del Pueblo. Los lamentables hechos son el dramático final de una serie de desaciertos, desavenencias y reclamaciones sociales que podrían haberse encauzado mediante la consulta libre e informada sobre territorios y derechos de las comunidades indígenas amazónicas.
El derecho a la consulta previa, libre e informada de los pueblos indígenas
El derecho a la consulta está establecido en el Convenio 169 de la OIT sobre pueblos indígenas y tribales en países independientes, ratificado por el Estado peruano el 2 de febrero de 1994. En palabras del profesor Rodolfo Stavenhagen, su ausencia es "el talón de Aquiles" de nuestros sistemas políticos, que no logran atender ni completar la inclusión de las reclamaciones y demandas de los pueblos indígenas en las Américas. El profesor Stavenhagen, ex Relator de la ONU para Pueblos Indígenas y miembro de la Junta Directiva del IIDH, está de visita en el Perú, como parte de una misión internacional que evaluará la situación.
Todo Estado democrático de derecho debe cumplir de buena fe las obligaciones internacionales derivadas de su ratificación del Convenio 169. En relación con el conflicto en Bagua Grande y Bagua Chica, el Convenio garantiza el derecho de consulta para sus habitantes originarios, que deben hablar por sí mismos y participar en todos los procesos de toma de decisiones que los afectan, como la existencia de varios decretos que autorizan la exploración y explotación de recursos de la Amazonía Peruana. El incumplimiento de este derecho amenaza seriamente las culturas, formas de vida, tradiciones, instituciones y derecho propio de los pueblos indígenas de esta nación.
Los principios rectores del derecho internacional de los derechos humanos tutelan como eje transversal el derecho a la consulta previa, libre e informada a las comunidades y autoridades indígenas tradicionales bajo sus propios mecanismos e instituciones y en sus idiomas milenarios. Estos principios se han visto fortalecidos especialmente a partir de la entrada en vigor del citado Convenio 169 de la OIT, la aprobación de la Declaración de Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y la jurisprudencia del sistema interamericano de protección de los derechos humanos. En la sentencia del caso Saramaka vs. Suriname, del 28 de noviembre de 2007, en el punto 8 de sus decisiones, la Corte Interamericana de Derechos Humanos declaró que:
"El Estado debe adoptar las medidas legislativas, administrativas o de otra índole que sean necesarias para reconocer y garantizar el derecho del pueblo Saramaka a ser efectivamente consultado, según sus tradiciones y costumbres, o en su caso, el derecho de otorgar o abstenerse de otorgar su consentimiento previo, libre e informado, respecto de los proyectos de desarrollo o inversión que puedan afectar su territorio, y a compartir, razonablemente, los beneficios derivados de esos proyectos con el pueblo Saramaka, en el caso de que se llevaren a cabo, en los términos de los párrafos 129 a 140, 143, 155, 158 y 194 (d) de esta Sentencia."
Adicionalmente, el 12 de junio Víctor Abramovich, primer vicepresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y Relator sobre los derechos de los pueblos indígenas, declaró que "la Convención Americana sobre Derechos Humanos, obliga a los Estados a realizar consulta previa libre e informada destinada a obtener el consentimiento de los pueblos y comunidades indígenas potencialmente afectadas por los programas de desarrollo y los proyectos de inversión que se ejecuten en sus territorios." (1)
Democracia y pueblos indígenas
La intervención desde la lejana centralidad no es la más eficaz iniciativa para tratar y menos para resolver los conflictos sociales en las localidades afectadas por acciones que ponen en riesgo los derechos colectivos de las comunidades sociales e indígenas sobre su hábitat y el manejo del territorio. "Las democracias de hoy deben hacer un mayor esfuerzo de comprensión de la diversidad étnica e incluir de una vez por todas la consulta libre e informada, ajustada a las costumbres vivientes y a los derechos de los pueblos indígenas de nuestra América", dijo Roberto Cuéllar M., director ejecutivo del IIDH. Seguramente así se caerá en la cuenta que ese método democrático y popular de diálogo previo es el más eficaz antídoto para prevenir la violencia que ahora enluta al pueblo peruano.
Lo ocurrido en Bagua Grande y Bagua Chica no es compatible con la democracia. Es impensable que al final de la primera década del siglo XXI, en un momento en el que se han generalizado los gobiernos electos por la ciudadanía en las Américas, sucedan tan graves acontecimientos, violatorios de los derechos de las comunidades indígenas y de los integrantes de la Policía Nacional.
El IIDH lamenta profundamente el irrespeto del derecho a la vida de las víctimas de Bagua Grande y Bagua Chica, indígenas y policías, así como la criminalización de las demandas ancestrales por el respeto a las tierras y territorios indígenas. También toma nota de la declaración del Estado peruano, de mantener su "firme compromiso con la democracia, la promoción y protección de los derechos humanos y la plena vigencia del Estado de Derecho", como lo expresara su Representante Permanente ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), la señora María Zavala Valladares. Espera que la instalación, hoy, del Grupo Nacional de Coordinación para el Desarrollo de los Pueblos Amazónicos sea el primer paso para la promoción de una consulta abierta, en los términos del C169, con la participación de los legítimos representantes de las comunidades amazónicas peruanas, que es urgente; y que la justicia se aboque al pronto esclarecimiento de los graves hechos y sancione a los responsables.
Notas:
(1) Comunicado de prensa No. 35/09, CIDH concluye visita de trabajo a Guatemala, del 12 de junio de 2009, en http://www.cidh.oas.org/Comunicados/Spanish/2009/37-09sp.htm
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* Roberto Cuéllar M. es Director ejecutivo del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH)
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Fuente: IIDH
Comentarios
La presidencia de Alan Garcia Pérez y su nuevo gabinete de delincuentes, rateros y asesinos esa banda de criminales tienen el descaro de gobernar el Perú.
y nosotros los peruanos solo escribimos comentarios de la mala polÃtica de Garcia y ahà no mas se queda, las huelgas y los paros que se hacen, están todas debiluchas ya que no hay el apoyo general de los peruanos.
El Perú tiene muchos problemas Sociales,y es un problema muy grande que no solamente les incumbe a los nativos sino a todo el Perú.
Nuestros Recursos Naturales tenemos que cuidarlos como la nina de nuestros ojos.
Los fujimoristas tienen empresas millonarias (con el dinero del pueblo)aquà y en USA al igual como Alan Garcia y su bancada, y aún siguen robando saqueando nuestro Perú y nosotros como ovejas solo hacemos meeeee y eso está muy mál...!!!
Todos los peruanos debemos de estar unidos, asà como lo hacen los Hondurenos, de hacer huelgas y paros pidiendo la RENUNCIA de Alan GarcÃa con todo su gabinete de genocidas, corruptos, seguir con los paros hasta que se vayan,uno tiene que ser constante, los que van a tener millonadas de pérdidas van a ser los apristas,fuji, lourdistas etc,.
Que entre un presidente de turno asà como fue como el buen presidente de "Paniagua" y despues eligeremos a Alberto Pizango, Rospigliosi, César Hildebrandt, Susana Villarán, la Sra. Vildoso.
Seria bueno elegir a un indÃgena como presidente, por supuesto que tiene que ser bien preparado.
No necesita estudios en Europa, ya hemos visto los resultados con los delincuentes del apra,fuji, unidad nacional,el delincuente de Alan Garcia, el no TIENE NINGUN DERECHO DE IMPONER SUS CANDIDATOS QUE NOSOTROS DEBEMOS ELEGIR,ESTA BIEN CLARO, QUE EN EL FUTURO NO QUEREMOS NI APRISTAS, NI FUJIMORISTAS, NI UNION NACIONAL,NI MILITARES YA QUE ESTAN DEMASIADO CORROMPIDOS.
Aparte que el militar está para que mande en su
ejército y no para gobernar un paÃs.
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