Servindi, 6 de noviembre, 2014.- Una vez más los indígenas del Cauca fueron blanco de las FARC. Ayer miércoles fueron asesinados dos miembros de la Guardia Indígena de Toribío, en el norte del Cauca, cuando desmontaban una valla alusiva a la muerte de un líder guerrillero.
Las víctimas han sido identificadas como Manuel Antonio Tumiñá Jenbuel, de 42 años de edad, oriundo de la vereda Pueblo Viejo, y Daniel Coicué Julicue de 63 años, residente de la vereda el Flayó, resguardo de San Francisco.
El crimen se perpetró cerca del mediodía y desde entonces la Guardia Indígena no ha dejado de movilizarse. En las últimas horas sus miembros han capturado a ocho presuntos guerrilleros, los mismos que están siendo acusados de haber participado en el crimen.
Según el dirigente indígena Manuel Julicue, los insurgentes permanecen en la sede del Cabildo Indígena de Toribío y serán presentados en una audiencia pública que se realizará este sábado en horas de la mañana.
“Inicialmente serán sometidos a la justicia propia con las determinaciones de las autoridades tradicionales y de la comunidad, posteriormente serán entregados a la justicia ordinaria”, explicó a los medios locales.
De acuerdo a declaraciones del alcalde de la localidad, Ezequiel Vitonás, "la información preliminar es que la guerrilla estaba haciendo propaganda alusiva a los comandantes que han muerto y la guardia indígena había resuelto quitar los carteles. En ese momento fue que se presentó el problema".
En ese mismo sentido informó la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte de Cauca (ACIN) al señalar que el desenlace fatal ocurrió cuando los dos guardias procedieron a impedir la distribución de propaganda alusiva al grupo armado ilegal.
La acción de los dos guardias se fundamentaba en que esta región es considerada por los indígenas un territorio de paz y neutral frente a los actores del conflicto.
Frente al violento hecho, el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) emitió un comunicado repudiando la muerte de los líderes.
"Según informaciones de las autoridades tradicionales, los hechos ocurrieron cuando los guardias indígenas recorrían el territorio en desarrollo de acciones de control territorial y se encontraban retirando una valla instalada por las FARC, alusiva al segundo aniversario de la muerte del comandante Alfonso Cano", explica el documento.
Continúa luego: "En ese momento se acercaron milicianos de las FARC quienes dispararon a los guardias a quema ropa".
Como reseñan diversos medios, no deja de ser contradictorio que la difusión de propaganda sobre lo que piensan las FARC de los diálogos en La Habana les cueste la vida a dos indígenas que justamente protegían sus territorios de paz.
Añadir nuevo comentario