En Bangkok se discutirán los objetivos para la lucha contra el cambio climático. Los principales obstáculos son fijar la tasa de calentamiento global en 1,5° o 2° Celsius como límite y en distribuir el dinero entre los países en vías de desarrollo para aplicar políticas de mitigación frente al cambio climático. De estas negociaciones dependería el éxito de la COP24 a realizarse en Katowice en diciembre.
Por José Díaz
Servindi, 3 de setiembre, 2018.- Este martes 4 de setiembre será una fecha clave para las negociaciones que buscan implementar las metas del Acuerdo de París. A tres meses de la COP24 donde se suscribirán los objetivos de este pacto, la ciudad de Bangkok será esta semana la sede de una reunión intermedia donde se espera avanzar en las negociaciones que involucran a más de 190 países.
Entre los puntos más importantes a discutir en Bangkok se encuentran fijar el límite de calentamiento global para la próxima década. Hasta hace unos meses el debate se encontraba entre quienes establecen los 2° C como meta y los 1,5° C, siendo esta última la propuesta respaldada por la mayoría de los científicos especialistas en el cambio climático.
Asimismo, se discutirá la distribución que tendrán los países más ricos para apoyar el fondo de 100 000 millones de dólares que se invertirán en los países más pobres para aplicar políticas de mitigación del cambio climático. En la anterior cumbre pre-COP24 que se realizó en Bonn (Alemania) el principal obstáculo fue precisamente el dinero a entregar por parte de los países más desarrollados, algo que se espera superar en Bangkok.
Por el momento los países en vías de desarrollo, quienes deben destinar la mayor parte de su inversión a fondos públicos, se mantienen esperando saber cuál será la manera como los países más desarrollados distribuirán el dinero.
Metas más ambiciosas
El ámbito que más preocupa en este debate a realizarse en Bangkok sigue siendo la meta fijada para el calentamiento global. En los últimos meses diversos informes científicos han demostrado que los valores actuales de emisión provocarán un incremento de 3° C con relación a la era preindustrial, un escenario que afectaría a millones de personas vulnerables al cambio climático.
Es por esta razón que en los últimos meses se hizo más fuerte la propuesta de establecer la meta de 1,5° C, algo que no ha sido del agrado de cierta parte de los países suscritos al Acuerdo de París. A eso se le suma la incrtidumbre política que generó en el 2017 el anuncio de Donald Trump de retirar a los Estados Unidos del pacto, lo que se ha reflejado en una disminución del flujo de dinero para el Fondo Verde.
“Dicen 'si nosotros, los países más pobres y más afectados por el cambio climático, somos capaces de estar en acuerdo con el objetivo 1,5ºC, no hay excusas para que los países más ricos no hagan lo mismo”, declaró este fin de semana Wael Hmaidan, director ejecutivo de Climate Action Network.
Lo cierto es que, de no haber progresos en los próximos días sobre metas más agresivas para el Acuerdo de París, los objetivos de la COP24 a realizarse en diciembre en Katowice (Polonia) podrían ser un fracaso anticipado.
Te puede interesar
Bolivia: #TIPNIS emerge como paradigma de la defensa de la #MadreTierra → https://t.co/xXA9OTLPip pic.twitter.com/n6H4SdTt3v
— Servindi (@Servindi) 31 de agosto de 2018
Añadir nuevo comentario