Comunidades menonitas son investigadas por tala y quema de hectáreas de bosque equivalentes a más de 70 campos de fútbol en territorios indígenas sikuani.
Servindi, 31 de mayo, 2021.- Tres comunidades indígenas sikuani denunciaron daños ambientales de menonitas en territorios ancestrales en el municipio de Puerto Gaitán (Colombia), donde ya ocupan más de 29 000 hectáreas de bosques.
Las comunidades indígenas Barrulia, Iwitsulibo y Tsabilonía denunciaron la quema y tala indiscriminada de bosques ante la Secretaría de Ambiente de Puerto Gaitán y Cormacarena, la autoridad ambiental local.
La defensa de los menonitas asegura que las denuncias de tala y quema son falsas; no obstante, los miembros de esta rama religiosa ya vienen siendo procesados por estos casos.
Así informa el reciente reportaje del portal Mongabay Latam, en alianza con Rutas del Conflicto y La liga Contra el Silencio, medios colombianos que vienen investigando las afectaciones de los menonitas en la región.
“Nosotros vivimos de la caza y de la pesca, y los cultivos de ellos están muy cerca de los caños. El agua se contamina y los peces no vuelven”, expresó un líder indígena.
Previamente, habían sido desplazados por masacres militares y cuando volvieron a sus territorios ancestrales, entre 2009 y 2011, encontraron daños ocasionados por menonitas, escasez de animales y fuentes de agua contaminadas.
Pruebas de delitos
El 16 de marzo de 2021, integrantes de la Secretaría de Ambiente de Puerto Gaitán y Cormacarena visitaron las zonas afectadas, a partir de lo cual identificaron la quema de 42 hectáreas de bosques.
Ello sería equivalente a 70 campos de fútbol, aproximadamente, que los menonitas ya estaban adecuando para sembrar cultivos de soya, arroz y maíz.
Los menonitas en Colombia tienen extensos cultivos de arroz, soya y maíz. Foto: Rutas del Conflicto
Tras una segunda visita el 24 de marzo, Cormacarena señaló que el área afectada ascendía a 135 hectáreas de bosque de galería.
Ahora los menonitas están involucrados en tres procesos en etapa de revisión judicial por tala indiscriminada y quema a cielo abierto y aludieron que estarían dispuestos a pagar sanciones administrativas, indica el reportaje.
Cabe mencionar que ya había investigaciones sancionadoras de Cormacarena contra Abraham Wolle Frossem, líder menonita investigado desde abril de 2020 por tala y quema de 93 hectáreas en Campo Alegre.
Este territorio de 6200 hectáreas está en territorio ancestral reclamado por comunidades indígenas sikuani y es allí donde se encontraron troncos abandonados, se decomisaron maquinarias y se suspendieron permisos.
Ecosistemas en peligro
Los bosques de galería ayudan a recopilar agua en épocas secas y son importantes en los ciclos hidrológicos, explicó la bióloga Tania González a Mongabay Latam, además de nutrir a la fauna del lugar.
La tala y quema, además de romper el ecosistema, impide que vuelvan a crecer árboles con la misma capacidad de almacenamiento de CO2 que los anteriores, explicó el biólogo Pablo Stevenson.
“Cuando el hombre quema y ayuda a que se destruyan los bosques, se hacen sabanas. Los árboles crecen poco y se pueden generar más incendios”, recalcó.
Así también, el coordinador del Programa Evaluación y Monitoreo de la Biodiversidad del Instituto Humboldt, José Ochoa, explicó que muchas especies se resguardan del cambio climático en los bosques y huyen ante la pérdida forestal.
Más invasiones menonitas
La abogada de los menonitas, Yenny Díaz, asegura que las denuncias de tala y quema son falsas y acusa a los indígenas de ocasionar los incendios.
Sin embargo, la comunidad religiosa tiene investigaciones por invasiones y destrucción de bosques en la Amazonía peruana, enfrentan procesos judiciales en México y son acusados de deforestación ilegal en Bolivia.
Ingresaron a Perú en 2016, provenientes de México, para sembrar soya, maíz y girasol. En Loreto y Ucayali han venido deforestando más de 2 800 hectáreas de bosques primarios en los últimos cinco años.
Una escena que se repite en el territorio donde se ha establecido la colonia menonita en Masisea, Perú. Foto: Sebastián Castañeda / Mongabay Latam
Ese mismo año ingresaron también a Colombia y en ambos casos omitieron mencionar que enfrentan procesos judiciales por aprovechamiento de agua y tala indiscriminada en México.
Por otro lado, en Bolivia deforestaron incluso dentro de un área protegida y cambiaron el curso del agua para cultivar arroz, ocasionando una masiva muerte de peces en Laguna Concepción, en Santa Cruz.
Encuentra el reportaje completo de Mongabay Latam, en alianza con Rutas del Conflicto y La liga Contra el Silencio aquí: https://es.mongabay.com/2021/05/colombia-menonitas-deforestan-un-territorio-ancestral-en-el-meta/
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