Los aportes del filósofo, político y militante revolucionario Antonio Gramsci son sustanciales para entender la crisis orgánica que atraviesan muchos regímenes políticos –como el peruano– al perder el consenso que les permite la hegemonía de un sistema de dominación.
Por Jorge Agurto
21 de enero, 2023.- En el día de la celebración de un nuevo año del natalicio de un gigante del pensamiento político como Antonio Gramsci, cuya experiencia de conducción en el semanario L'Ordine Nuovo influyó en el amauta José Carlos Mariátegui La Chira, conviene recordar algunas de sus ideas esenciales.
Ello es particularmente pertinente al caso peruano que vive una seria crisis política que puede derivar en una ’crisis orgánica’ y ante la cual advertíamos la imperiosa necesidad de un proyecto contrahegémonico (1).
Sobre la hegemonía
El término hegemonía deriva del griego ἡγεμονία hēgemonía ('dirección, primer puesto, preferencia, mando, jefatura') del verbo ἡγεμονεύειν hēgemoneúein que significa 'guiar, preceder, conducir' y de la cual derivan los significados «estar al frente», «comandar» y «gobernar».
Por ἡγεμονία se entendía en griego antiguo la dirección suprema del ejército. El hēgemṓn era el conductor, el guía y también el comandante del ejército.
Según Gramsci, la hegemonía existe cuando la clase dominante no solo es capaz de obligar a una clase social subordinada a que satisfaga sus intereses, renunciando a su identidad y a su cultura grupal, sino que también la primera ejerce control en las formas de relación y producción de la segunda y el resto de la sociedad.
Este proceso no posee un carácter explícito, sino que más bien se da de manera sutil. En este sentido, la clase social subordinada adopta las concepciones de la clase dominante y las incorpora a su repertorio ideológico, hecho ligado a lo que comúnmente se denomina «sentido común».
A modo de ejemplo, el sistema dominante actual impone algunos sentidos comunes hegemónicos como los siguientes:
- El desarrollo social se basa en el crecimiento económico.
- Necesitamos la inversión privada para crear fuentes de trabajo que nos sacarán de la pobreza.
- El Perú es un país minero, rico además por sus recursos naturales como el petróleo, el gas, etc.
- La Constitución Política de 1993 no debe ser cambiada por que generará inestabilidad política y alejará la inversión extranjera.
En medio de la crisis política actual los medios corporativos hiperconcentrado enfatizan otras ideas pilares que mantienen el sistema actual como los siguientes:
- “La actual democracia no es perfecta, pero es el mejor sistema que tenemos”.
- “Los congresistas de la República representamos a toda la nación”.
- “La ley es igual para todos”.
- “Vivimos en un estado de derecho y tenemos la obligación de respetarlo”.
- “Los manifestantes actúan manipulados por extremistas”.
- “Los terroristas están detrás de las manifestaciones de protesta”.
- “Las fuerzas policiales y militares son tutelares de la nación y no son deliberantes”.
- “Las fuerzas policiales hacen uso proporcional de su fuerza en el marco del irrestricto respeto a los derechos humanos”.
- “El gobierno es respetuoso del derecho a la protesta y siempre está dispuesto al diálogo”.
- “Expresamos nuestro pesar por las víctimas fallecidas y manifestamos nuestras condolencias a los deudos”.
El rol de los medios en la construcción de hegemonía
A diferencia de otros teóricos marxistas Gramsci consideró de suma importancia el rol de los aparatos y mecanismos ideológicos de dominación como parte activa y dinámica de la superestructura.
Por esto, además de las relaciones económicas o materiales de producción social (estructura) y de la sociedad política y de la sociedad civil (superestructura), concede especial importancia a la dinámica cultural.
La cultura es una suerte de argamasa que permite consolidar una hegemonía en base a un consenso fabricado con ayuda de los medios de comunicación e instituciones diversas como la escuela.
Es la valoración y comprensión de este factor cultural las que llevaron a Antonio Gramsci y el amauta José Carlos a priorizar la labor periodística y cultural como un eje clave de la actividad política.
La perspectiva era eriosonar la hegenonía dominante y sembrar las bases de un proyecto contrahegémonico que solo podía prosperar creando una nuevo sentido común y un nuevo proyecto superior de nación.
El Bloque Histórico, un aporte esencial
En las categorías de crisis orgánica y bloque histórico se encuentran dos de las claves para comprender el sentido de la hegemonía. Estas categorías están ligadas a la forma de encarar la relación base-superestructura como compleja, mediada, contradictoria. Estructura y superestructura componen un “bloque histórico”,
La superestructura del bloque histórico forma una totalidad compleja en cuyo seno Gramsci distingue dos esferas esenciales: por una parte, la sociedad política que agrupa el aparato del Estado y por la otra la de la sociedad civil, es decir, la mayor parte de la superestructura.
La clase dominante necesita de los medios de la superestructura para asegurar su dominación tanto en el ámbito de la sociedad civil como en el de la política.
“Gramsci distingue entre dominio y dirección; el primero se basa en la coacción y siempre está presente; el segundo en la hegemonía, que se mueve en el terreno de la ideología y busca asegurar el consenso” escribe Juan Trías Vejarano (2).
En la medida de que la obra de Gramsci se escribió de manera dispersa debido a las vicisitudes de la cárcel, Hugues Portelli (3) hace una muy buena explicación del concepto de bloque histórico de Antonio Gramsci en un pequeño libro a partir de una lectura comprehensiva de sus textos.
Referencias:
(1) Agurto, Jorge: La falsa democracia y la necesidad de un proyecto contrahegemónico, en Servindi: https://www.servindi.org/10/01/2023/mentiras-comunes-de-la-falsa-democracia
(2) Trias Vejarano, Juan: Gramsci y el bloque histórico: https://www.servindi.org/actualidad-opinion/21/01/2023/gramsci-y-el-bloque-historico
(3) Portelli, Hugues: Gramsci y el bloque histórico, Siglo XXI editores. Descarga en formato PDF en la dirección: https://periferiaactiva.files.wordpress.com/2018/06/portelli-gramsci-y-el-bloque-histc3b3rico.pdf (155 páginas).
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