Servindi, 19 de abril, 2023.- “La pandemia ha puesto de relieve la importancia de garantizar que los pueblos indígenas puedan ejercer su autogobierno y libre determinación” indica un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Por ello, “es esencial que los Estados aseguren la participación de los pueblos indígenas (...) en la formulación e implementación de políticas públicas para enfrentar el alto riesgo de extinción física y cultural de los pueblos indígenas”.
Descargue publicación en el siguiente enlace: https://www.oas.org/es/cidh/informes/pdfs/2023/PandemiaDDHH_ES.pdf
Así lo indica el informe "Pandemia y Derechos Humanos", que da cuenta de los impactos ocasionados en los derechos humanos debido a los efectos del contexto de la pandemia de COVID-19.
Las medidas adoptadas, lecciones aprendidas y las recomendaciones se desarrollan a lo largo de los 5 capítulos.
Se relacionan con: Estado de excepción, restricciones a las libertades fundamentales y Estado de derecho; y los impactos en los derechos humanos y diferenciados en poblaciones que históricamente se encuentran en especial situación de vulnerabilidad.
Para enfrentar las consecuencias de la pandemia, la CIDH destaca la importancia de desarrollar e implementar, en los distintos niveles de gobierno, políticas públicas que permitan consolidar una estrategia integral con enfoque de derechos humanos.
"Este informe temático constituye una herramienta fundamental para el análisis, abordaje y gestión desde las políticas públicas con enfoque de derechos humanos para atender esta situación y sus impactos, así como para contextos similares que en el futuro desafíen a la humanidad” destacó la presidenta de la CIDH, Margarette May Macaulay
Pueblos y comunidades indígenas
La histórica discriminación hacia los pueblos indígenas se ha traducido en una vulneración estructural y sistemática de sus derechos humanos, especialmente sus derechos económicos, sociales, culturales y ambientales.
En relación con el impacto de la pandemia en los pueblos indígenas, la CIDH identificó carencias en la atención médica con enfoque multicultural y demoras en la respuesta estatal en cuanto a la atención a esas poblaciones.
A ello se agrega la falta de consulta y consentimiento en relación a las políticas de prevención y mitigación.
La Comisión ha advertido a los Estados sobre los riesgos crecientes que afrontan los pueblos indígenas en la región, especialmente, respecto a los conflictos territoriales y ambientales asociados a las actividades extractivas.
En América Latina y el Caribe los pueblos indígenas constituyen más del 8,5% de la población, y son los que tienen a la mayor proporción de personas en situación de pobreza extrema.
Los datos de nueve países indican que los pueblos indígenas comprenden a cerca del 30% de las personas viven en pobreza extrema, esta cifra significa que los pueblos autóctonos de América Latina son tres veces más proclives a padecer ese flagelo que otros grupos de población.
En cuanto al derecho a la salud de los pueblos indígenas, la CIDH manifiesta su preocupación por el número insuficiente de camas disponibles en hospitales y centros de atención médica ubicados en regiones con altos porcentajes de población indígena.
Asimismo, se observaron desafíos en el plano cultural; en particular, preocupa a la CIDH que la mayoría de los servicios no son culturalmente adecuados.
Ello se expresa en una atención que desconoce las prácticas de la medicina tradicional y la diversidad lingüística y cultura de los pueblos indígenas.
Al respecto, la Comisión tomó conocimiento sobre la falta de protocolos de prevención y atención médica dirigidos a poblaciones indígenas en varios países de la región .
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