En junio se celebra el Mes de la Cultura Afroperuana. A pesar de su legado artístico e histórico, aún persiste la desigualdad en esta comunidad. Una de las herramientas para contrarrestarla será el resultado del Censo Nacional 2017, que incluirá por primera vez una pregunta de autoidentificación étnica.
Por Meylinn Castro
Servindi, 3 de junio, 2017.- Por cuarto año consecutivo, nuestro país rendirá un merecido homenaje al legado cultural de la comunidad afroperuana, que según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), representa entre el 2 y 3 por ciento de la población nacional.
A través de la Resolución Ministerial N° 182- 2014- MC, el Ministerio de Cultura declaró que a partir del 2014 se celebre el Mes de la Cultura Afroperuana. Esto con la finalidad de visibilizar la situación de esta comunidad y plantear políticas para mejorar su calidad de vida.
La fecha central de esta festividad es el 4 de junio y es denominada como el Día de la Cultura Afroperuana. En el 2006, el Congreso de la República propuso esta fecha para rendir tributo a Nicomedes Santa Cruz, destacado poeta, periodista, investigador y gestor cultural afroperuano.
Legado de Nicomedes Santa Cruz
Nicomedes Santa Cruz nació el 4 de junio de 1925 en el distrito de La Victoria. Fue reconocido como el máximo representante afroperuano en Perú por ser el primer poeta en abordar temas sobre su comunidad, resaltando sus aportes culturales.
Sus principales contribuciones las realizó en el mundo literario y artístico. Como poeta, destacó en las décimas, que son composiciones de diez versos octosílabos. Las más reconocidas son A cocachos aprendí, La pelona y De ser como soy, me alegro.
Junto con una de sus hermanas, llevó a cabo un movimiento de reivindicación del legado folclórico de raíces afroperuanas, a través de obras de teatro, participaciones en estaciones de radio y la prensa escrita. Se formó como periodista y colaboró con diversos medios de comunicación.
Personajes notorios
En las escuelas se habla de la importancia de la comunidad afroperuana con respecto a la pintura y otras actividades artísticas. No es usual que se mencione a héroes históricos. Esto a pesar de la existencia de varios personajes notorios.
Un ejemplo claro es Micaela Bastidas. Ella fue una prócer y mártir de la independencia peruana y principal consejera de Túpac Amaru, con quien compartía sus ideales de libertad. En las ilustraciones de los textos escolares es representada con rasgos indígenas. Sin embargo, se comprobó que era una afrodescendiente.
Catalina Buendía de Pecho es otra exponente. Es reconocida como “la heroína de Ica”. Según narra la historia, durante la invasión chilena en Perú, ella envenenó a una delegación que torturaba a su comunidad.
Buendía ofreció al grupo una jarra de chicha de jora. Para que los integrantes no sospechen, ella también tomó un sorbo de la bebida mortal, exclamando: “Por nuestra gloria”. De esta manera, murió junto con los integrantes chilenos.
Otra luchadora social fue María Elena Moyano, feminista y dirigenta vecinal del distrito de Villa El Salvador. Durante la época de Sendero Luminoso, Moyano alzó su voz contra los terroristas y luchó por la defensa de los derechos humanos. Esto le costó la vida.
¿Cuál es la situación de la comunidad afrodescendiente?
De acuerdo a un estudio especializado realizado en el 2014 por el Ministerio de Cultura y el Grupo de Análisis para el Desarrollo (Grade), se identifican algunos datos que revelan la desigualdad que aún existe en nuestro país.
- La Población Económicamente Activa (PEA) afroperuana es de 59 por ciento, un 15 por ciento menor que la PEA a nivel nacional.
- El porcentaje de jóvenes afroperuanos que ha accedido a la educación superior es menor en 6 por ciento al total nacional.
- El 31 por ciento de los jefes de hogares afroperuanos de 40 años a más sufre de hipertensión arterial mientras que a nivel nacional esta cifra es de 18 por ciento.
- Las experiencias de discriminación que han sufrido los jefes de hogar afroperuanos han sido principalmente por el color de su piel (32 por ciento), seguida por el hecho de ser pobre o tener un origen socioeconómico bajo (13 por ciento).
El desafío del Censo Nacional 2017
Como se mencionó al inicio de este informe, el último dato del INEI sostiene que la comunidad afroperuana representa entre el 2 y 3 por ciento de la población nacional. Sin embargo, diversos investigadores y organismos manejan diferentes cifras.
La estadística se podrá clarificar cuando se ejecute el Censo Nacional de Población de este año, el cual implementará por primera vez una pregunta sobre autoidentificación étnica.
Al respecto, Álvaro Gálvez, Director de Políticas Indígenas del Ministerio de Cultura (Mincu) aseveró que la única forma de incluir el componente étnico en los censos ha sido mediante la pregunta sobre lengua materna. Esto invisibilizó a la población afroperuana.
“La comunidad afroperuana ha sido excluida de todo proceso de estudio estadístico integral, porque no hay variable de lengua. Su invisibilidad es preocupante porque no se cuenta con políticas públicas específicas para la población afroperuana”, resaltó Gálvez.
Sin duda, esta será una oportunidad para que los afrodescendientes y otras comunidades sean identificados. De esta manera, el Estado podrá diseñar y ejecutar mejores políticas públicas para que la calidad de vida de estas personas sea mucho mejor.
Con el reconocimiento de la diversidad cultural se logrará cortar las brechas de desigualdad. Y así, vivir en una sociedad más justa y armoniosa. En un futuro no muy lejano expresaremos lo que alguna vez dijo Nicomedes Santa Cruz: “De ser como soy, me alegro”.
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