Organizaciones y representantes demandaban la urgente inclusión de propuesta de reparaciones para reivindicar los derechos de las personas más afectadas por la crisis climática pero propuesta fue bloqueada por Estados Unidos y la Unión Europea.
Servindi, 13 de noviembre, 2021.- Acabó la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático con una sensación de decepción e impotencia debido a la exclusión de la exigencia de crear un fondo para financiar el pago de pérdidas y daños (Loss and Damage).
La Unión Europea y Estados Unidos se negaron a crear un fondo al que los países más pobres pudieran recurrir para responder a la crisis, lo que indignó a las naciones más vulnerables al calentamiento global.
La propuesta buscaba que los más ricos, los mayores contaminantes históricos, establezcan un mecanismo de reparaciones económicas para las regiones más afectadas por los cambios irreversibles que ya viene sufriendo el planeta.
La propuesta llevada por los países del G77 y China al pleno de la conferencia fue finalmente bloqueada por Jonh Kerry y Frans Timmermans, representantes de Estados Unidos y la Unión Europea, respectivamente.
Se trató de una COP atiborrada de más de 500 lobistas de la industria del petróleo, el gas y el carbón, situación que aunada a las limitaciones y restricciones para participar resultaron en un evento con alto predominio de personas de naciones ricas y privilegiadas.
La situación obliga a pensar si las Conferencias de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático son el mejor escenario para negociar temas claves para la humanidad como la crisis climática. A propósito la próxima COP27 se efectuará en Egipto.
draft political #COP26 decisions circulated grossly fail any credibility tests:
phase out of fossil fuels references are now so weakened down that is is mind-blowing
on #LossAndDamage: outcome proposed here is basically more blablabla
these drafts CANNOT be accepted pic.twitter.com/idR0qX2wHQ— Sébastien Duyck (@duycks) November 13, 2021
No se evitará superar el umbral crítico
Si bien el texto final acuerda aumentar los compromisos de reducción de carbono, eliminar gradualmente algunos combustibles fósiles y aumentar la ayuda a los países pobres no se garantiza evitar que la temperatura supere el umbral crítico de 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente emitió antes de la COP26, el “Informe sobre la Brecha de Emisiones 2021” en el que advierte que los compromisos de reducción de emisiones de GEI acordados por los países hasta el momento nos llevan a un aumento catastrófico de la temperatura global de alrededor de 2,7 grados Celsius.
Esto constituye un incremento mucho mayor que los 1,5 grados establecidos como objetivo en el Acuerdo de París de 2015.
"Todos somos muy conscientes de que, colectivamente, nuestra ambición climática y nuestra acción hasta la fecha no han cumplido las promesas hechas en París", admitió Alok Sharma, ministro de Estado británico y presidente de las conversaciones de Glasgow al término de la convención.
Según el texto final, se requerirá que todos los principales emisores en un plazo de doce meses expliquen a la ONU cómo sus políticas y planes económicos se alinearán con los objetivos de temperatura del Acuerdo de París.
La necesidad de acordar la "eliminación progresiva" de los combustibles fósiles se vio frustrada por un acuerdo de China, Estados Unidos, India y la Unión Europea, quienes habrían influido en cambiar el texto a favor de una "eliminación gradual".
Cabe destacar que China es el mayor consumidor mundial de combustibles fósiles, mientras que Estados Unidos es el mayor productor mundial de combustibles fósiles.
“Decir que los países deberían desacelerar gradualmente el uso del carbón y luego eliminar, también de forma gradual, los subsidios para los combustibles fósiles significa que esta COP cree que el uso de los combustibles fósiles debería continuar” criticó el ambientalista nigeriano Nnimmo Bassey.
ONU: Compromisos son insuficientes
El secretario general de las Naciones Unidas António Guterres, se reafirmó en que se deben acabar con las subvenciones a los combustibles fósiles, eliminar gradualmente el carbón y poner un precio al carbono.
Guterres consideró que no se ha cumplido el compromiso de US$100 mil millones de financiación climática para apoyar a los países en desarrollo y desarrollar la resiliencia de las comunidades vulnerables.
Asimismo, considera insuficientes los compromisos para acabar con la deforestación, reducir drásticamente las emisiones de metano y movilizar la financiación privada en torno a la red cero. “Son pasos bienvenidos, pero no son suficientes”, remarcó.
La ciencia nos dice que la prioridad absoluta debe ser la reducción rápida, profunda y sostenida de las emisiones en esta década. En concreto, una reducción del 45% para 2030 en comparación con los niveles de 2010. Pero el actual conjunto de las NDC -incluso si se aplican en su totalidad- seguirá aumentando las emisiones en esta década en una senda que nos llevará claramente a superar los 2°C a finales de siglo en comparación con los niveles preindustriales (António Guterres, secretario general de la ONU).
El controvertido articulo 6
El acuerdo sobre las nuevas reglas del mercado de carbono crea un régimen comercial estructurado entre países, aunque el lenguaje no es lo suficientemente claro como para evitar que las empresas hagan trampas.
Por tal motivo y en respuesta a los temores de un lavado verde corporativo, se creará un nuevo grupo de expertos en 2022 para evaluar los planes corporativos de red cero, según anunció el secretario general de la ONU, António Guterres.
Una pregunta clave será si estos planes realmente impulsan la reducción efectiva y real de emisiones o simplemente efectúan compensanciones que pueden dar lugar a doble contabilidad.
Efectos latentes
Yolanda Wright, del programa de Clima y pobreza infantil de Save the Children, sostuvo que el fondo sobre pérdidas y daños es para atender efectos de la crisis climática que ya existen y van creciendo a diario.
“No estamos hablando de los impactos climáticos distantes que podrían suceder, estamos hablando de las crisis que están ocurriendo en este momento, donde los niños se ven afectados primero”, subrayó Wright.
En el mismo sentido, la coordinadora para la política climática de ActionAid International, Teresa Anderson, calificó el último texto de la COP26 como “una bofetada para quienes ya están lidiando con los devastadores impactos de la crisis climática”.
Anderson, cuestionó las pocas acciones que se toman para ayudar a comunidades indígenas, agricultores, mujeres y niñas frente a la crisis climática.
Llamado a la resistencia
Tasneem Essop, Directora ejecutiva de la Red de Acción climática (Climate Action Network – CAN), cuestionó enérgicamente lo que calificó como un bloqueo a la propuesta.
“Los países ricos han demostrado una vez más su total falta de solidaridad y responsabilidad para proteger a quienes enfrentan los peores impactos climáticos”, sostuvo.
Además, instó a los representantes de los países en desarrollo a que “actúen en interés de sus ciudadanos y se mantengan firmes frente a los matones”, en alusión a las potencias mundiales que bloquean acuerdos.
Saleemul Huq, del Centro Internacional para el Desarrollo y Cambio Climático (International Centre for Climate Change and Development - ICCCAD), señaló la poca credibilidad de los representantes del Reino Unido.
En alusión a la propuesta de financiamiento a los países más afectados, Huq sostuvo que el borrador que circuló el sábado era “incluso peor” que el del día anterior. Además, realizó serias acusaciones.
“La Presidencia de la COP ha sido intimidada durante la noche para abandonar la propuesta de Financiamiento de Pérdidas y Daños de Glasgow”, afirmó.
Adrián Martínez, de la Ruta del Clima, lamentó la falta de reconocimiento de los países desarrollados sobre su responsabilidad frente a la situación global actual.
“Los borradores actuales no protegen a las personas, sino que protegen la codicia de las empresas de combustibles fósiles y las opiniones coloniales de los políticos de los países desarrollados”, dijo
Ante esta situación, enfatizó que los países en vías de desarrollo no fueron a la conferencia “para negociar nuestros derechos ni recibir caridad”, sino obtener acuerdos efectivos.
En adición, Mohamed Adow, director de Powershift Africa, indicó que los países más vulnerables no se pueden permitir dejar la conferencia con un acuerdo con serias exclusiones.
Finalmente, el director de la CAN para Asia del Sur, comentó que “Las voces de los más vulnerables y más afectados han sido silenciadas y el interés de las corporaciones de combustibles fósiles ha sido claramente complacido por la presidencia de la COP del Reino Unido”.
Toma de acciones
Ante la negativa, miembros de la sociedad civil ingresaron al pleno de la COP26 y realizaron protestas hasta el último momento para presionar a la decisión de las potencias mundiales de financiar el acuerdo Loss and Damage.
Asimismo, enfatizaron en que el acuerdo de Glasgow tenga un enfoque de derechos humanos y justicia climática.
NOW: Civil society at #COP26 is taking action to elevate the desperate need for #LossAndDamage finance as the climate talks wind to a close.
Millions of people are dying from climate crisis. This is not a “future” problem.
Rich countries *must* compensate for losses + damages. pic.twitter.com/dWUT7nkvhV
— Collin Rees (@collinrees) November 13, 2021
Meanwhile, outside of that room, activists demand a strong agreement on #ClimateFinance to help poorer nations cope and adapt to climate change. "We came to Glasgow with a very clear demand, that we want finance for loss and damage," says @harjeet11 #COP26 pic.twitter.com/gjDs7TBltC
— DW Global Ideas & Environment (@dw_environment) November 13, 2021
La lucha continúa
Lamentablemente, “los pueblos indígenas son vistos como una mera herramienta para la conservación de los bosques que puede recibir apoyo financiero“ expresó Stefan Thorsell, asesor climático del Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (IWGIA).
“Este es un error de juicio fatal de los gobiernos de todo el mundo” afirmó Thorsell quién destacó que los pueblos indígenas hicieron aportes desde el Foro Internacional de Pueblos Indígenas sobre Cambio Climático (FIPICC).
Los pueblos contribuyeron con su conocimiento hacia las soluciones climáticas y entregaron once recomendaciones específicas. A pesar de esto y de su valiente lucha por mantener vivo el objetivo de 1,5 grados este no fue considerado.
José Gregorio Díaz Mirabal, líder de la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) afirmó que “hasta ahora el modelo de desarrollo extractivista ha engañado al mundo”.
“Sin embargo, esto tiene que cambiar ahora. Si la solución es proteger la naturaleza para evitar el cambio climático, esto sólo se puede hacer con la titulación para los pueblos indígenas”.
Se nos debe permitir autodemarcar nuestros territorios “para evitar que vengan invasiones externas, ya sea de petróleo, oro, minería o cualquier tipo de explotación extractiva” dijo el vocero principal de la COICA, entidad que articula a pueblos amazónicos de nueve países.
Asad Rehman, portavoz principal del movimiento COP26 Coalition, fue invitado a participar en la cumbre oficial. Decepcionado ante la falta de avance en las negociaciones, rompió el discurso que había preparado y dijo, en cambio:
“Los más ricos han ignorado el llamamiento moral y político de hacer lo que les corresponde. Las promesas rotas que van desparramando por la COP26 ya no engañan a nadie. Estamos decepcionados y enojados, pero aún tenemos esperanza. Sabemos que es la gente común la que cambia la historia y nosotros la cambiaremos”.
Cobertura especial de Servindi de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 26) gracias al apoyo del Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (IWGIA). | ||