El tráfico ilegal de madera en la frontera con Ecuador pone en peligro a los niños de la comunidad.
Servindi, 18 de mayo, 2021.- Desde hace dos semanas, una niña wampís de Boca Chinganaza está desaparecida. Se solicitó apoyo al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables el 12 de mayo y aún no hay respuesta.
Ante la situación y nuevos indicios del posible secuestro, autoridades de la comunidad en Río Santiago, Amazonas, prohibieron la entrada y salida de extranjeros, informó Evaristo Pujupat, familiar de la víctima, a Servindi.
“Hemos acudido a diferentes sabios y nos han dicho que la niña no está muerta, está secuestrada”, expresó Pujupat, quien también es comunicador del Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW).
Además, se ha recogido el testimonio de un comunero que señaló haber oído a la niña llorando desde una balsa alquilada hacia el norte del río, pero la declaración está siendo investigada.
En los esfuerzos de hallar a la pequeña de 6 años se ha enviado una carta al Consejo de Gobierno Pueblo Shuar Arutam (CGPSHA) de Ecuador solicitando apoyo para la incansable búsqueda.
Familiares han circulado la foto del DNI de la niña en redes sociales pidiendo ayuda. Foto: Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís
La hipótesis vigente
Al inicio se pensó que la niña pudo haberse ahogado en el río de la comunidad o que un espíritu malo (el Chuyachi) la había secuestrado.
Ambas hipótesis fueron descartadas cuando no encontraron su cuerpo ni en el río ni en los bosques ni en montañas aledañas, búsqueda en la cual apoyaron varios grupos de personas de la comunidad.
La tercera posibilidad es que sujetos irracionales la hayan secuestrado con fines comerciales, se señala en la carta de petición de ayuda a Ecuador, firmada por el Equipo de comunicación de la Nación Wampís.
“El trabajo de la balsa, la ilegalidad de madera ha generado trata. No solamente esto, sino que hay sujetos que vienen haciendo tratos internos que quieren comprar cráneos de seres humanos”, explica Pujupat.
A ello se suma que un comunero señaló haber oído a una niña llorando en una chalupa alquilada con otras tres personas, en la comunidad de Kim, dirigiéndose hacia el norte del río.
Actualmente se está realizando investigaciones con la persona que alquiló el bote.
Madera talada en territorio wampís. Foto: Diego Benavente
Anteriores desapariciones
En los últimos años ha habido otros tres casos de niños de la comunidad desaparecidos, señaló el comunicador wampís. Ello coincide con el aumento de taladores ilegales ecuatorianos en el territorio.
Ninguno de ellos fue encontrado. Se realizaron denuncias a la fiscalía, pero no se lograron definir las pistas suficientes para hallarlos.
“Solicito a las autoridades peruanas para que puedan intervenir lo más pronto posible. Quiero recuperar a la niña desaparecida”, expresa Hevaristo, que continúa trabajando y solicitando apoyo para encontrar a la pequeña.
Carta enviada al Consejo del Gobierno Pueblo Shuar Arutam
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