Servindi, 31 de julio, 2019.- Las demandas educativas de los adolescentes en un contexto de diversidad cultural, cambios tecnológicos y de grandes desafíos globales fue el tema central del seminario “Generación Bicentenario: adolescentes y educación".

El evento fue organizado por el Ministerio de Educación (Minedu), la Pontificia Universidad Católica del Perú, Unicef, Unesco y la Fundación Wiese los días 17, 18 y 19 de julio,

La ministra de Educación, Flor Pablo Medina, resaltó la necesidad de desarrollar una política multisectorial para el bienestar de los adolescentes, por lo que hizo un llamado a poner por delante a los adolescentes en la agenda pública y dar atención a sus necesidades y expectativas.

“Tenemos que pensar en esa múltiple diversidad para que cada adolescente pueda ver con esperanzas su futuro y pueda vivir un presente de oportunidades que no esté marcado por las limitaciones, la violencia y el propio sistema", agregó.

Por su parte, la directora de la Dirección de Servicios Educativos en el Ámbito Rural (Diser), Maribel Aguilar, presentó las acciones realizadas por esta oficina. "Desde el año 2018, venimos trabajando en el diseño, gestión y puesta en marcha de estrategias que aseguren las condiciones básicas para el aprendizaje de los estudiantes que viven en zonas rurales”, afirmó.

Asimismo, sostuvo que el Minedu cuenta con modelos de servicios educativos de secundaria en alternancia y con residencia estudiantil para aquellos escolares que viven en zonas rurales a varias horas de distancia de los centros educativos.

“Estos modelos brindan la posibilidad de gestionar espacios seguros para que los adolescentes de ámbitos rurales permanezcan en el sistema educativo, por lo que desde el Minedu venimos coordinando esfuerzos con otros sectores como el Midis, Qali Warma, Minsa, Cultura y MIMP”, precisó.

Los modelos de servicios educativos se han adecuado a las características de la población, y el éxito en la formación de los estudiantes de nivel secundario se logra con la participación activa de los padres de familia y de la comunidad en el proceso formativo de sus hijos e hijas.