Representantes de pueblos indígenas de América Latina reclamaron la titularidad de tierras en la región en un foro en la ciudad de Bonn. Además, solicitan gestionar fondos destinados a luchar contra el cambio climático.
DW, 26 de junio, 2019.- "Necesitamos que se titulen 106 millones de hectáreas en la Amazonía”, reclamó Gregorio Mirabal, Coordinador General de Desarrollo de la Coordinadora de la Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA), en el 'Global Landscape Forum', que se celebró del 22 al 23 de junio en Bonn, Alemania. "Si tenemos nuestros territorios asegurados, puede haber una mejor implementación de las acciones”, agregó, refiriéndose a aquellas dirigidas a la restauración de bosques.
El foro, que se centró en los derechos del paisaje, reunió a diversos representantes de pueblos originarios de América Latina que pudieron "dar a escuchar su voz”. "Agradezco el espacio, estamos esperando su apoyo”, dijo el líder indígena. "Necesitamos nuevos aliados si queremos recuperar el espíritu del Acuerdo de París”, aseguró, solicitando que "el apoyo llegue realmente a las comunidades”.
"Queremos que los fondos climáticos lleguen a las comunidades directamente afectadas y no a grandes consultorías”, señaló en entrevista a DW Lizardo Cauper, presidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP). No obstante, el líder peruano explicó que dichos fondos no llegan a las comunidades porque los trámites son "muy burocráticos”. Igualmente, reclamó "una participación activa y efectiva de los pueblos en los espacios de plataformas climáticas tomando decisiones conjuntas”.
"El problema climático no es responsabilidad de un gobierno, es para la humanidad”, recordó, llamando a tomar acciones y mecanismos para afrontar este reto global. Así, abogó porque los gobiernos consideren la visión holística de los pueblos indígenas en el desarrollo sostenible y sustentable y subrayó algunas propuestas que se están desarrollando desde este ámbito, como el proyecto alternativo "Bosques en Pie” en Perú.
"No podemos hablar de acción climática sin territorio”, apuntó, recordando la "presión” que sufre la Amazonía por actividades extractivas, agronegocios, la tala ilegal y la minería, que además vulneran los derechos de sus habitantes. "Para nosotros, territorio y derechos van juntos, no están separados”, afirmó.
"No podemos hablar de acción climática sin territorio”, apuntó, recordando la "presión” que sufre la Amazonía por actividades extractivas, agronegocios, la tala ilegal y la minería, que además vulneran los derechos de sus habitantes.
Largos procesos
Cauper recordó la "demanda histórica de 20 millones de hectáreas” del gobierno peruano e instó a este a "dar seguridad jurídica, reconocimiento y titulación de tierras de las comunidades nativas de la Amazonía peruana”.
No obstante, según Silvina Baldovino, Directora del Programa de Biodiversidad y Pueblos Indígenas de Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), "en los últimos años hemos avanzado; estamos en un país en reconocimiento de los derechos colectivos de sus pueblos”. "El presidente quiere cerrar la brecha de titularidad de las comunidades indígenas”, dijo Baldovino a DW, calificando la situación de "histórica”. Así, recordó la entrega, hace un mes, de 66 títulos de tierras en el departamento de Loreto, "una de ellas, de un proceso que duró más de 50 años”.
Para la experta peruana, "es una necesidad dar seguridad a las comunidades nativas” ya que "no se puede tener desarrollo sin seguridad jurídica”. Para ello, abogó por "trabajar de la mano” entre organizaciones indígenas, Estado regional y nacional. En este sentido, reconoció que "las autoridades están haciendo esfuerzos” en valorar el rol de los pueblos indígenas en cuanto a las lenguas y al manejo de tierras.
Contra la criminilización, "resistencia"
Además de luchar por el derecho a la tierra, los pueblos indígenas en América Latina deben velar por sus vidas, ya que la región concentra el mayor número de defensores ambientales y de derechos humanos asesinados cada año.
"No es fácil hablar de lo que sucede en los territorios. Hay miedo, porque hemos estado viviendo agresiones de la minería, persecución, asesinatos...”, reconoció a DW Jessica Vega, presidenta de la Red de Jóvenes Indígenas de América Latina, una organización surgida en 2011 para defender los derechos para pueblos indígenas.
A pesar de que este suceso afecta principalmente a adultos, la joven mexicana lo tiene claro: "Tenemos que respaldar a nuestra comunidad en las imposiciones que quieren hacer a nuestro territorio”. "Los jóvenes se han empoderado gracias al trabajo de los mayores; sentimos la responsabilidad de dar continuidad”, declaró. "Como juventud tenemos el rol de la preservación del medio ambiente”, añadió reafirmando su postura: "Si hieren nuestra existencia, seremos resistencia”.
Junto con México, Colombia y Brasil son los países más letales para ese colectivo. En el último caso, "la lucha por la tierra es cada vez mayor”, aseguró a DW Sônia Guajajara, excoordinadora ejecutiva de la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB). La líder indígena criticó que "hoy el gobierno en Brasil solo piensa en desmontar todas las políticas de legislación ambiental” y acusó al mismo de haberse convertido en "un gobierno genocida, ecocida, autorizando la deforestación, y etnocida”, en tan solo seis meses. Asimismo, criticó el retroceso en los derechos conseguidos y abogó por la "lucha, mobilización y resistencia” para seguir adelante.