Servindi, 17 de junio, 2019.- “Pachamama” película de animación estrenada por Netflix narra la vida del pueblo inca antes de la llegada de los colonizadores españoles y la defensa de la naturaleza ante la invasión y saqueo de los poderosos.
La cinta está nominada como mejor película de animación en los Premios César del cine francés, que se entregará el próximo 22 de junio París.
Su protagonista es Tepulpaï, un niño inquieto de diez años que vive en el altiplano peruano y quiere ser chamán; pero durante una de las ceremonias más tradicionales para la comunidad, una huaca de oro sagrado es confiscada por un malvado ser.
La película es dirigida por el argentino Juan Antín y su trama se centra en las vivencias de dos pequeños que buscan convertirse en personas adultas en un mundo de tradiciones milenarias del antiguo Imperio incaico.
Toda la historia de Pachamama se desarrolla con el decorado de fondo de la cordillera andina, lo que ha convertido el trabajo de diseño gráfico y animación en un verdadero desafío para sus creadores.
La historia transcurre en 1532, cuando los españoles liderados por Francisco Pizarro invadieron la región en busca de oro.
Pachamama es una fábula que contempla tradiciones milenarias, pasajes musicales y escenas donde abundan los cóndores, pumas, llamas, la flora y las costumbres típicas peruanas.
¿Cómo surgió la idea de Pachamama?
El director argentino señaló que la idea le surgió cuando estaba en un festival de cine en Cuba presentando su primera película: “Mercano el marciano”.
Antín explica, “estaba mirando al mar y tuve una visión. Me imaginé todos esos barcos que venían de Europa y España hace 500 años. Dije: ‘guau, puedo imaginar cómo los indígenas vieron a estos hombres llegar y pensaron que eran dioses’".
“Empecé a imaginar los diferentes puntos de vista que cada uno tiene del otro y pensé que sería una buena idea para una película”, refirió Antín.
Juan Antín trabajó durante catorce años en el desarrollo del proyecto que le valió una nominación al premio César (el Oscar francés) a mejor largometraje de animación.
Para la preparación, Juan Antín con su equipo, previamente realizó investigaciones en los campos historia, etnografía y antropología.
En este sentido ha recordado que la evolución del proyecto ha estado muy influenciada por el trabajo de su esposa, antropóloga de profesión, que estaba desarrollando en ese momento un trabajo social en Argentina con comunidades indígenas.
El director habló también con líderes de las comunidades y algunos chamanes. “Fue entonces cuando realmente me enamoré de esta cultura de Pachamama, cómo adoran la tierra. Están en gratitud y enamorados de la tierra, es muy simple”, señaló.