ONU Derechos Humanos y CIDH manifestaron su preocupación por vulnerabilidad de defensores de derechos humanos en Brasil por lo que pidieron redoblar esfuerzos para protegerlos.
Servindi, 28 de marzo, 2017.- Amerigo Incalcaterra, representante para Sudamérica del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), instó a las autoridades brasileñas a actuar rápidamente para conocer los autores de los dos últimos asesinatos y garantizar que los crímenes no queden impunes.
Esto, en referencia a los asesinatos de Waldomiro Costa Pereira, militante del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) en Parauapebas, Pará, y del cacique Antonio Mig Claudino de la Tierra Indígena Serrinha, en el norte de Rio Grande del Sur, que ocurrieron el 20 de marzo.
Incalcaterra también mostró su preocupación por la vulnerabilidad de defensores y defensoras de los derechos humanos, por lo que pidió a las autoridades brasileñas a redoblar refuerzos para protegerlos.
“Brasil es uno de los países más peligrosos para las defensoras y los defensores de derechos humanos”, sostiene Incalcaterra, y agrega que por ello, activistas que luchan por la reforma agraria, líderes sindicales, campesinos y comunitarios, líderes indígenas, quilombolas y tradicionales son más vulnerables a ataques y amenazas.
Por su parte, el comisionado José de Jesús Orozco, Relator sobre los Derechos de los Defensores y Defensoras de Derechos Humanos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), señaló que el Estado está obligado a investigar de manera pronta y efectiva ambos homicidios y sancionar a los autores materiales e intelectuales.
Asimismo, detalló que las políticas de protección por sí solas son insuficientes para atender la situación de manera integral, sino que es necesario una política global con enfoque especial a la prevención, protección e investigación de ataques contras los defensores de la tierra, el medio ambiente y de los pueblos indígenas.
Cabe recordar que el 2018, la Organización de las Naciones Unidas celebrará 20 años de la adopción de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Defensores de los Derechos Humanos.