La revelación de los sobornos de Odebrecht a diversos gobiernos de Latinoamérica ha generado gran revuelo. En Perú la constructora brasileña ganó la concesión de megaobras como el Gasoducto Sur Peruano y proyectos de irrigación como Chavimochic u Olmos. ¿Cómo se definirá el futuro de estas obras?
Por José Carlos Díaz Zanelli
Servindi, 22 de diciembre, 2016.- Sin duda alguna la noticia más impactante de fin de año en Latinoamérica se dio esta semana. Y es que la justicia de Estados Unidos reveló detalles sobre los sobornos realizados por la constructora Odebrecht en nueve países latinos. Como era de esperarse, uno de los más complicados es Perú.
Según las últimas revelaciones, la constructora brasileña realizó soborno de US$ 29 millones de dólares para la obtención de obras públicas entre los años 2005 y 2014 en el Perú.
Como se sabe, la obra pública más grande de Odebrecht en este país es el polémico Gasoducto Sur Peruano, concesión que comparte con las firmas Enagás y Graña y Montero.
Al respecto, la participación de Odebrecht en esta obra acaba de ser transferida a la firma de inversiones canadiense Brookfield. El convenio implicó la inclusión de una cláusula anticorrupción por imposición del Ministerio de Economía y Finanzas.
Las obras en el Perú
Sin embargo, la lista de obras públicas ganadas por Odebrecht –se presume que de manera fraudulenta– es bastante larga en el país.
Una de las que viene siendo ejecutada actualmente es la tercera etapa del proyecto de irrigación Chavimochic, destinado a proveer de agua a todos los terrenos de cultivo de la zona norte de La Libertad.
Otra megaobra cuya concesión fue ganada por Odebrecht es el proyecto de irrigación e hidroenergético de Olmos, ubicado en Lambayeque. No obstante, hace unas semanas la constructora brasileña anunció la venta total del proyecto ante la crisis que está afrontando.
Las obras de transporte también fueron de interés para Odebrecht, siendo una de la más importante la construcción de la Línea 1 del Metro de Lima y teniendo a cargo la construcción de la Línea 2. Estas obras las comparte con la constructora nacional Graña y Montero.
Por último, una obra que fue inaugurada en 2015 y realizada enteramente por Odebrecht fue la central hidroeléctrica Chaglla, ubicada en la región de Huánuco. Esta inmensa represa implicó una inversión de US$ 1.200 millones de dólares.
En el Perú, las gestiones gubernamentales de Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala son las complicadas en este inmenso entramado entorno a la constructora brasileña. ¿Cuál será el futuro de las obras pública de Odebrecht en el país? Esta es una pregunta que las autoridades deben responder.