Servindi, 3 de diciembre, 2016.- La Nación U´wa se declaró en alerta permanente para protegse er Zizuma, la montaña sagrada en la Sierra Nevada del Cocuy y Guican.
Demandan que se mantenga el cierre de Zizuma hasta que se reestablezca el equilibrio espiritual, ambiental y cultural de los territorios ancestrales en el marco del acuerdo para proteger la Madre Tierra celebrado con el gobierno nacional el 27 de julio de 2016.
Señalan que el primer paso es realizar un estudio intercultural de impactos socioambientales y que el equipo para desarrollar el estudio, la metodología y la implementación debe estar bajo la dirección autónoma de la Nación U´wa.
Indican que el Gobierno Nacional debe modificar el régimen jurídico actual que sobrepone el interés privado sobre el interés general que ellos representan y protegen.
Piden ser incluidos en los los diálogos de paz para discutir el modelo de desarrollo económico; recuperar los territorios ancestrales; sanear y titular sus resguardos y reconocer su soberanía integral en todas sus dimensiones físicas y espirituales.
Recalcan que con fundamento en su Ley de Origen continuaran luchando y resistiendo, en unidad con la Madre Tierra y sus pueblos hermanos.
A continuación reproducimos la nota de prensa completa presentada por la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
Declaración Política de la Nación U'wa
Nosotros, la Nación U´wa de los departamentos de Boyacá, Santander, Norte de Santander, Arauca y Casanare; el Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia; la Organización Nacional Indígena de Colombia; Amazon Watch; Earth Rights International; Dejusticia; Kinorama Producciones; Endémica Estudios; el Comité Colombia por los derechos Humanos – Washington; GivePower; Mujer U´wa; la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento - CODHES, el Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo –CAJAR-; el Grupo de Estudios TERRAE, nos hemos reunido en la Cumbre Por La Defensa Del Territorio, La vida y los Recursos Naturales en Tamaria el Chuscal, Resguardo Unido U´wa (Jurisdicción del Municipio de Cubará, Departamento de Boyacá, Colombia) en un ejercicio de intercambio de experiencias y saberes de los pueblos del mundo para fortalecer la unidad y la solidaridad tan necesaria en estos momentos.
Consideramos que:
1. Nuestros territorios ancestrales se ven amenazados por los intereses de las industrias extractivas rompiendo el equilibrio espiritual, natural, biológico y cultural. Las acciones de las empresas y el Estado aumentan el riesgo de nuestro exterminio físico y cultural.
2. El Gobierno Nacional construye y acomoda el marco legal en beneficio del interés privado representado por las trasnacionales y las diferentes industrias extractivas. Todas estas acciones violan los derechos de nuestra Madre Tierra y nuestros pueblos.
Un ejemplo de estas reformas inconstitucionales es el proyecto de ley de consulta previa que el gobierno del presidente Santos presentó en la Mesa Permanente de Concertación a finales de octubre de 2016. Esta iniciativa es una muestra clara de la violación de los derechos fundamentales de los pueblos indígenas.
3. El Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos viene desarrollando un proceso de paz con el propósito de terminar el conflicto armado. No obstante, en este proceso ha olvidado que en el país existen otros tipos de conflictos como los sociales, culturales, ambientales económicos y territoriales, los cuales en muchas ocasiones han generado más destrucción, muerte y dolor que las mismas armas.
4. Como nosotros otros pueblos del mundo se están articulando y resistiendo en contra de las políticas extractivas que atacan la vida de nuestros pueblos hermanos.
Declaramos que:
1. Como guardianes de la Madre Tierra, la Nación U´wa nos declaramos en alerta permanente para la protección de Zizuma, nuestra tierra y territorios ancestrales. Recordamos a nuestros hermanos pueblos, la comunidad nacional e internacional, que desde la época de la colonia el Estado colombiano ha incumplido los acuerdos a los que ha llegado con la Nación U´wa para la protección de nuestra Madre Tierra.
El 27 de julio de 2016, la Nación U´wa y el Gobierno Nacional acordaron proteger la Madre Tierra por medio del cierre de Zizuma. Este cierre se debe mantener hasta que se reestablezca el equilibrio espiritual, ambiental y cultural de nuestros territorios ancestrales.
El primer paso, en el proceso de defensa de Zizuma, es la realización del estudio intercultural de impactos socioambientales (De U´wa Riowa). Reiteramos que la selección del equipo para desarrollar el estudio, la metodología y la implementación debe estar bajo la dirección autónoma de la Nación U´wa.
Las decisiones futuras sobre Zizuma se basarán en las conclusiones de este estudio. Por tanto, el Gobierno debe reconocer que nosotros, la Nación U’wa, somos los guardianes de Zizuma, la autoridades sobre nuestro territorio. Debe ser la Ley de Origen la que se implemente en la protección de Zizuma y para eso, debemos ser nosotros quienes tengamos la soberanía sobre este territorio ancestral.
La Nación U´wa sigue esperando que Riowa cumpla su palabra, como nosotros los hemos hecho hasta el momento.
2. Que la Nación U´wa es autónoma y por tanto nuestros derechos no son concesiones del gobierno de turno sino reconocimientos de nuestra Ley de Origen y nuestros derechos constitucionales.
La Nación U´wa somos guerreros milenarios que desde la época de la colonia nos hemos movilizado y resistido para que el Estado reconozca nuestros derechos. Los avances a los que hemos llegado, en el derecho occidental, no son concesiones de los Riowa sino el resultado de nuestra lucha pacífica por la protección de nuestros territorios ancestrales y vidas. Incluso la Corona Española reconoció nuestra propiedad y soberanía sobre el territorio que hemos habitado y usado ancestralmente entregándonos los títulos coloniales de la nación de Tierradentro.
El Gobierno Nacional debe modificar el régimen jurídico actual que sobrepone el interés privado sobre el interés general que nosotros representamos y protegemos. Para esto, debe construirse una nueva política basada en el respeto y el reconocimiento de nuestros derechos, especialmente del consentimiento previo, libre e informado.
3. En el proceso de implementación de los acuerdos de paz con las FARC y el desarrollo de la negociación con el ELN, se deben tener en cuenta todos los conflictos que vivimos en nuestros territorios. Para esto es preciso incluirnos dentro de los diálogos de paz; discutir el modelo de desarrollo económico; recuperar nuestros territorios ancestrales; sanear, ampliar y titular nuestros resguardos; reconocer nuestra soberanía integral sobre el territorio en todas sus dimensiones físicas y espirituales y garantizar nuestra autonomía política y territorial.
4. Con fundamento en nuestra Ley de Origen continuaremos luchando y resistiendo, en unidad con la Madre Tierra y nuestros pueblos hermanos, por la defensa de nuestros territorios y la pervivencia física y cultural de la humanidad. Todas estas acciones las realizamos en aras de fortalecer y globalizar la resistencia y la esperanza.
¡GUARDIANES DE LA MADRE TIERRA, PLANETA AZUL!
¡POR UNA COLOMBIA LIBRE Y SOBERANA, UNIDAD Y LUCHA!