Servindi, 2 de noviembre, 2016.- A pocos días del inicio de la cumbre climática COP22 en Marruecos reproducimos la nota de la Asociación Interéntica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP) sobre el Mandato aprobado en la III Cumbre Amazónica que reunió a representantes indígenas de nueve países amazónicos.
El documento resume el posicionamiento político de las organizaciones indígenas de la cuenca amazónica articuladas en la COICA frente a la crisis climática que desafía a la humanidad.
El documento fue oportunamente difundido al término de la Cumbre Amazónica realizada los días 27 y 28 de octubre en el hoterl Los Delfines, en Lima y fue oportunamente difundido por Servindi (ver nota).
III Cumbre Amazónica: "Debemos asumir compromisos para salvar el planeta"
Por Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP)
El mandato de la III Cumbre Amazónica es el documento que da voz a los acuerdos y compromisos logrados por todas las organizaciones indígenas que participaron en los paneles de discusión, durante los tres días de actividades en el marco de la III Cumbre Amazónica.
Este año, el documento indígena tuvo 10 incisos que dejan sentir la urgencia de un cambio global; pues las consecuencias de las problemáticas indígenas ya no son temas regionales, sino que sus soluciones serán la llave para seguir habitando nuestro planeta al borde del colapso ecológico.
El extractivismo como parte del “desarrollo” mundial no abraza a la vida, por el contrario son los bosques y los ecosistemas protegidos milenariamente por las poblaciones indígenas los que ofrecen el aire que necesitamos para respirar. Por ello proponemos una política de hidrocarburos bajo tierra y el cese de megaproyectos que destruyen los territorios indígenas, los bosques y arrasan con la vida y la cultura de nuestros pueblos hermanos. Expresaron unívocos.
La ciencia afirma como mejores cuidadores del bosque a los pueblos indígenas
Hoy tenemos a la ciencia de nuestro lado, pues en tiempos de desastre climático se nos da la responsabilidad de mantener y preservar la selva para mitigar el calentamiento global y equilibrar el clima para bien de la humanidad. En este sentido son los pueblos originarios y en aislamiento los que han logrado vivir en mayor armonía con la naturaleza, por lo que exigimos el absoluto respeto a sus tierras y a su modo de vida; y bajo ningún motivo aceptamos injerencias económicas en sus hábitats.
Las organizaciones que formamos la COICA tenemos iniciativas de desarrollo verdaderamente sostenible que deben ser parte de los planes mundiales de conservación y protección del medioambiente. Somos una fuerza imprescindible para mitigar las emisiones y a través de las RIA (Red indígena amazónica) asegurar territorios que servirán como los pulmones del mundo. Todo ello sustentado en la economía ancestral indígena que mediante un manejo holístico del territorio y el vínculo inseparable con la tierra ofrece una verdadera vida plena que es la alternativa al modelo de desarrollo depredatorio que ofrecen las economías imperantes.
Estamos convencidos de que la sabiduría ancestral de los recursos y del medio ambiente son en extremo necesarios para que los distintos países de la región logren llegar a los acuerdos tomados en París y así disminuir el riesgo del colapso climático. Es por lo mismo que todos los pueblos amazónicos debemos tener una participación activa en las decisiones que se tomen en torno a la protección de la biodiversidad. La fragilidad a la que nos ha llevado el sistema de desarrollo actual nos obliga a unirnos en una voz global y a denunciar los abusos a nuestros pueblos hermanos en cualquier lugar del planeta, expresaron los más de 100 representes que llegaron a la cumbre amazónica en su tercera edición.
Los pueblos concluyeron que el planeta entero comienza a verlos como los dueños del futuro para las siguientes generaciones, por su labor en la protección de los bosques “los hemos mantenido vivos y hemos logrado ser el oxígeno que el Planeta necesita. Nuestro vínculo con la tierra es ancestral y nadie mejor que nosotros sabe cuidar de este bien; porque no es nuestro, es de nuestros hijos, de nuestros nietos y de los hijos de nuestros nietos” culminaron.