- Deploran actitud genuflexa de John W. Ashe, presidente de la Asamblea General de la ONU que pone en incertidumbre realización de Conferencia Mundial sobre Pueblos Indígenas.
Servindi, 23 de mayo, 2014.- Un tarde de frustración y decepción se vivió el viernes 23 de mayo en la sesión del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas al quedar en el limbo la realización de la Reunión plenaria de Alto Nivel también conocida como la Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas (CMPI).
El evento previsto a realizarse en setiembre de 2014 quedó en ciernes luego que Crispin Gregoire, asesor y representante de John W. Ashe, presidente de la Asamblea General, anunciara la falta de acuerdo con los Estados para realizar el evento cumbre conforme a la hoja de ruta presentada el lunes 19.
Las delegaciones oficiales de numeros países asi como representantes indígenas deploraron la actitud genuflexa del presidente John W. Ashe, que ha conducido la organización de la Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas a un entrampamiento sin precedentes.
Numerosos oradores demandaron que John Ashe cumpla su deber de hacer efectivo el mandato contenido en la Resolución 66/296 de la Asamblea General de las Naciones Unidas que define los procedimientos para organizar la denominada conferencia mundial.
La citada resolución, aprobada el 17 de septiembre de 2012 por la máxima instancia de las Naciones Unidas, define aspectos de suma relevancia para los pueblos indígenas como su participación mediante un copresidente, propuesto por los pueblos y reconocido por el Presidente de la Asamblea General.
También define un procedimiento de consulta, un mecanismo de diálogo interactivo y una "audiencia interactiva oficiosa" a realizarse a mas tardar en junio de 2014.
La expectativa de los pueblos indígenas del mundo es enorme porque la Asamblea General también definió que la Conferencia Mundial tenga como resultado "un documento final conciso y orientado a la acción".
Precisa que ese documento deberá "contribuir a la realización de los derechos de los pueblos indígenas, perseguir los objetivos de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y promover el cumplimiento de todos los objetivos de desarrollo convenidos internacionalmente".
Como es obvio, la participación indígena en todas las fases y niveles de la organización de la Conferencial Mundial es un asunto sustancial y legítimo que se desprende de su condición de pueblos y con derecho a intervenir en los asuntos que les conciernen.
Sin embargo, hasta ahora, John W. Ashe, ha evitado cumplir la denominada resolución procedimental de la ONU con el argumento de que hay Estados que se oponen a darle un estatus especial de participación a los pueblos indígenas en un cónclave reservado para los Estados.
Cabe mencionar que la hoja de ruta propuesta el lunes 19 por John W. Ashe modifica el nivel de la participación indígena en la organización de la Conferencia Mundial al sustituir la intervención de un "co-facilitador indígena" por "dos asesores".
Los pueblos indígenas, en una muestra de flexibilidad y madurez, aceptaron la hoja de ruta y esperaban hasta el viernes 23 que los Estados también acepten la propuesta. Sin embargo, el anuncio fue negativo.
Los principales países que expresaron su oposición a la participación plena y efectiva de los pueblos indígenas en la organización de la conferencia mundial son Rusia, India y Bangladesh. Sin embargo, no se descarta que existan otros países influyentes detrás de dicha posición.
Según algunos observadores y analistas especializados John W. Ashe no está ejerciendo el poder que le ha concedido la Asamblea General.
El representante de John W. Ashe anunció que la presidencia intentará una nueva consulta con los Estados, pero lo que no se sabe es si se presentará una nueva hoja de ruta aceptable para ellos o se insistirá en la presentada previamente.
La incertidumbre coloca en el tapete el análisis de si habrán condiciones auténticas para una Conferencia Mundial sobre Pueblos Indígenas que esté a la altura del mandato de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Esto reaviva el debate acerca de los pro y los contras de cancelar o postergar el magno evento hasta que existan mejores condiciones para su realización.
Como lo han advertido diversos sectores, esta situación pone en entredicho la voluntad, la imagen y la legitimidad de las Naciones Unidas ante los pueblos indígenas. Mientras, voceros del Grupo Coordinador Global Indígena (GCG) siguen a la espera de una acción decisiva del Presidente y de los Estados.
John W. Ashe, de la nacionalidad Antigua y Barbuda, fue elegido Presidente del sexagésimo octavo período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 14 de junio de 2013.s Se desempeñó como embajador de su país ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) y jefe negociador de su gobierno para los temas de desarrollo sostenible.
Lea la resolución sobre procedimientos para la Conferencia Mundial sobre Pueblos Indígenas con un clic en el siguiente enlace: