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- Florentino Barrios, presidente de la comunidad, afirmó que alistan una marcha de sacrificio desde Cañaris con destino a la carreta Fernando Belaúnde.
Servindi, 17 de marzo, 2014.- A las 7 de la noche de ayer domingo se regularizó el tránsito en la vía de acceso al campamento minero de la empresa Candente Copper, en Lambayeque. Los comuneros que se encontraban en el lugar, todos ellos del distrito San Juan de Cañaris, regresaron a sus hogares luego de que sus delegados acordaran suspender la medida.
El acuerdo fue resultado de una larga reunión desarrollada en la zona de Upay Pitag, en las cercanías del campamento minero, hasta donde habrían llegado cerca de 500 comuneros.
En entrevista con Servindi, Florentino Barrios, presidente de la comunidad San Juan de Cañaris, sostuvo que la reunión sirvió para llegar a importantes acuerdos, uno de ellos: la realización de una marcha de sacrificio hacía la carretera marginal Fernando Belaunde Terry.
Sobre la fecha de la movilización, Barrios optó por no pronunciarse señalando que "el tema lo están viendo 45 delegados comunales y los seis miembros de la junta directiva de la comunidad".
Como se recuerda, el bloqueo de la vía que conduce al campamento minero, en uno de los desvíos de la carretera de penetración Fernando Belaúnde Terry, se dio para evitar que la empresa retome sus actividades de exploración.
Según contó el dirigente, cuando se tomó la decisión, el 15 de este mes, la cantidad de comuneros que acompañaron el bloqueo eran de 150, luego se irían sumando más hasta llegar a los 300, para finalmente ser 500 la noche de ayer.
El dirigente lamentó que el Gobierno a través de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), y a más de un año de surgido el conflicto, no haya podido dar solucíon al tema.
"La PCM que estaba encargada del tema no ha resuelto, no ha habido gente capacitada para solucionar el conflicto en Cañaris", afirmó Barrios en referencia a la mesa de diálogo que se instaló para tratar el caso y que no tuvo mayores resultados.
De otro lado señaló que pese a que existe un sector de la población que no los apoya y que solo busca minimizar su lucha, él y otras autoridades seguirán trabajando para que se respete lo expresado por la comunidad en una consulta popular el 30 de setiembre de 2012, donde dijeron "no" a la actividad minera.