Servindi, 23 de julio de 2012.- El domingo 29 de julio se dará oficialmente inicio a la consulta que resolverá si una carretera cruza o no el Territorito Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). El anuncio se hace casi dos semanas después de que los indígenas de la IX Marcha retornaran a sus comunidades sin conseguir su objetivo de dialogar con el Gobierno.
Pese a que el proceso ya ha sido confirmado por el mismo presidente Evo Morales son varias las comunidades que le han negado el ingreso a sus territorios a los brigadistas del Ministerio de Obras Públicas que tienen a su cargo la “socialización” del protocolo de la consulta.
El cuestionado proceso, al que se oponen numerosas comunidades al amparo de la Ley Nº 180 que declara la protección del TIPNIS, al parecer se desarrollará bajo un clima tenso luego del anuncio que hicieran los indígenas de las tierras bajas de alistar una resistencia.
La socialización, proceso que empezó hace algunas semanas, es el último recurso que emprende el gobierno en busca de la anulación de la intangibilidad del territorio protegido para dar paso así a la construcción de la vía Villa Tunari – San Ignacio de Moxos.
Comunidades favorecidas por mandatario no apoyarían consulta
Las comunidades ubicadas en el sector de Gundonovia al que más de una vez ha llegado el presidente Evo Morales para entregar regalos –motores fuera de borda para embarcaciones pequeñas, antenas, entre otros– no aceptaron el ingreso de los brigadistas que realizan las actividades previas a lo que será propiamente la consulta.
Las siete comunidades ubicadas en este sector señalaron, tal como lo indican diversos medios locales, que esperarán el retorno de sus dirigentes que participaron en la IX Marcha. Los mismos que estando en La Paz recibieron del gobierno agua y gases lacrimógenos.
De otro lado se supo que seis comunidades indígenas sí aceptaron el ingreso de los brigadistas que lograron exponer frente a los originarios los términos del protocolo de consulta. Sin embargo, las comunidades manifestaron que esperarán el retorno de sus dirigentes, los mismos que participaron en la IX Marcha.
La táctica del Gobierno para dar cumplimento a la Ley 222 de consulta previa
Cuando quedaba menos de un mes para llevarse a cabo el proceso de consulta, que originalmente estaba programado para el 20 de julio, Wilfredo Obando, presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), señaló que la consulta previa ya estaba a destiempo.
Sin embargo, para posponerlo el Gobierno se valió de una formalidad que consistió en remitir el proyecto de protocolo al Tribunal Supremo Electoral con una demora de nueve días.
Según las disposiciones de la consulta, esa remisión debió hacerse con un mes de anticipación al inicio de la consulta, por lo que el Tribunal Supremo Electoral fue el ente que anunció la nueva fecha en base a la interpretación del mes que debe transcurrir entre el día de remisión del documento y el inicio de la consulta.
Algo que llamó la atención en su momento ya que el anuncio de la postergación lo debió hacer el ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, responsable por ley de la ejecución del proceso.
Por su parte el defensor del Pueblo, Rolando Villena, sostuvo que la consulta debe posponerse hasta nueva fecha "hasta que hayan niveles de consenso entre iguales, estamos hablando de pueblos indígenas, pero también los niveles de acuerdo de concertación con el Gobierno".
Remarcó de esta manera que el Gobierno debe acatar el fallo del Tribunal Constitucional (TCP) en cuanto a la consulta previa, es decir debe llegar a un consenso con los indígenas del TIPNIS previo a la consulta. “El ejecutivo debe limitarse (...) Preocupa que existan enfrentamientos. No es un asunto de mayorías ni minorías” aseveró en entrevistas recientes.
Oromomo, la primera comunidad en ser consultada
Hasta la comunidad de Oromomo en el noreste del TIPNIS llegarán las brigadas encargadas de la consulta. Pero se prevé que de forma simultánea este proceso también empiece en dos poblaciones más que aún están por definirse.
La entidad a cargo del proceso de consulta, que por Ley no puede extenderse más allá de la primera semana de setiembre, es el Servicio Intercultural de Fortalecimiento Democrático (Sifde), perteneciente al Órgano Electoral Plurinacional.
Juan Carlos Pinto, jefe del Sifde, informó que se prevén dos bases de operación: la capital del Beni, Trinidad; y el municipio de Villa Tunari de Cochabamba. Pinto detalló asimismo la composición de las brigadas que tendrán la labor de hacer la consulta.
Según el protocolo cada una estará conformada por al menos cinco personas: dos funcionarios de gobierno, dos “facilitadores indígenas” y un encargado de logística. A esto se tendría que añadir dos personeros del Tribunal Electoral y al menos un veedor; de modo que cada brigada la conformarán un número mínimo de ocho personas.
Gobierno tendría cifra oficial de comunidades consultadas recién el 28
Tras el anuncio que hicieron los indígenas que formaron parte de la IX Marcha de establecer una resistencia ante la consulta en el mismo TIPNIS, se supo que a través de los dirigentes del TIPNIS que se formarán brigadas de indígenas que impedirán el ingreso de funcionarios del Tribunal Supremo Electoral.
Así lo sostuvo Fernando Vargas, presidente de la Subcentral del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure, quien tras remarcar que no busca “tumbar” el gobierno de Evo Morales, afirmó que defenderán sus territorios y lucharán por sus vidas.
Vargas consideró de este modo que la construcción de la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos marcaría el inicio del fin de la vida de los originarios del país.
Del lado del gobierno aún no se tiene una cifra oficial de qué comunidades van a ser las que participen de la consulta. Se estima que recién un día antes de dar paso a la consulta se tendrá el número exacto de las comunidades en las que se realizará la consulta y terminarán de concertar el protocolo.