Desplazados awá en Inda Sabaleta, Departamento de Nariño. Foto: ACNUR
Servindi, 13 de junio, 2012.- Un informe presentado a Naciones Unidas (ONU) y la Corte Penal Internacional da cuenta de cómo el pueblo awá, ubicado en los departamentos de Nariño y Putumayo, está al borde del exterminio físico y cultural a causa del conflicto armado que vive el país.
El informe “S.O.S. a la ONU y a la Corte Penal Internacional sobre el exterminio del Pueblo Awá de Colombia”, que fue presentado esta semana en rueda de prensa en Barcelona, fue elaborado por el Observatorio por los Derechos de los Pueblos Indígenas en Colombia con la colaboración de la Unidad Indígena del Pueblo Awá (UNIPA).
La rueda de prensa fue organizada en la sede de la Federación de Asociaciones de Vecinos y Vecinas de Barcelona y convocada por el Observatorio, el Instituto Catalán Internacional por la Paz (ICIP) y la Taula Catalana por la Paz y los Derechos Humanos en Colombia.
Tica Font, directora del ICIP, y José Aristizábal, en representación del Observatorio, explicaron las atrocidades de las que está siendo víctima este pueblo indígena e instaron a los organismos de la ONU y la Corte Penal Internacional y a la sociedad civil de Cataluña y Colombia a actuar de manera inmediata.
El informe dirigido a James Anaya, Relator Especial de la ONU sobre la situación de los pueblos indígenas, será presentado en una rueda de prensa en Barcelona el día de hoy, 12 de junio.
El documento también está dirigido a Francis M. Deng, Asesor Especial del Secretario General de la ONU sobre la Prevención del Genocidio, a Myrna Cunningham, Presidenta del Foro Permanente de la ONU sobre Cuestiones Indígenas y a Fatou Bensouda, Fiscal de la Corte Penal Internacional.
Situación del pueblo awá
En los últimos años se ha agudizado la violencia contra el pueblo awá debido a la intensificación del conflicto armado en su territorio, el incremento de los cultivos ilícitos de coca y la explotación de oro que de forma ilegal se lleva a cabo en los resguardos indígenas.
En el año 2009 el pueblo awá fue víctima de dos masacres y de un total de 41 asesinatos. En el primer semestre de 2010 se registraron 4 asesinatos y 4 desapariciones.
Finalmente, entre noviembre de 2010 y mayo de 2012, se han presentado 9 asesinatos más, 2 muertes por minas antipersonal, 3 violaciones sexuales y 7 desapariciones forzadas.
El Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas describió su situación de “genocidio” y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a su favor el 16 de marzo de 2011.
El mes de agosto de 2011, la Corte Constitucional reiteró que “el pueblo Awá está en grave peligro de ser exterminado física y culturalmente a causa del conflicto armado y de la omisión de las autoridades para ofrecerle una protección adecuada”.
Por ello, ordenó la creación de un “Plan Provisional Urgente de Reacción y Contingencia que atienda de manera inmediata e integral las necesidades más urgentes de seguridad física y atención humanitaria”.
A pesar de toda la jurisprudencia nacional e internacional para la protección del pueblo awá y los numerosos informes y recomendaciones realizados por los organismos de las Naciones Unidas, el exterminio de este pueblo continua día a día.
Se trata de un territorio de gran importancia para los actores del conflicto armado, donde confluyen grupos paramilitares, guerrillas, mafias y buscadores de oro que amenazan, secuestran y asesinan con total impunidad, con el objetivo de producir el terror entre las comunidades indígenas y forzar su desplazamiento.