21 de setiembre del 2010.- Diez niños indígenas entre dos y seis años contrajeron enfermedades graves a la piel tras ingerir agua contaminada en la localidad de Coyaima, capital del departamento de Tolima.
La denuncia fue hecha por el gobernador indígena de Tutira, Nelson Peloche, quien indicó que la zona de Coyaima se ha visto gravemente afectada por la contaminación de lixiviados, producto del funcionamiento indebido de un basurero a cielo abierto en la vereda Zaragosa.
Ante lo ocurrido, el Defensor del Pueblo de Tolima, Santiago Ramirez, realizó una acción de tutela contra la alcaldía de Coyaima y Cortolima, añadiendo que la administración municipal es permisiva al admitir el funcionamiento ilegal del basurero.
El alcalde de Coyaima, Jorge Arturo Aragón, manifestó que dicho basural se debe trasladar a otros municipios contiguos, pero este proceso supone un alto presupuesto que su municipio no posee.
Por su parte, en Cortolima, se ordenó a través de dos resoluciones, la suspensión de toda actividad que produzca residuos sólidos, pero hasta el momento no se han llevado a efecto.