Protestas por Hidroelectrica de Inambari
Servindi 17 de junio, 2010.- El acuerdo energético entre Brasil y Perú culminó con la firma del mismo, en medio de un clima peligroso en el interior del país.
Mientras en el exterior se refuerzan las relaciones bilaterales entre Perú y Brasil, en el interior se desarrollan una seria de movilizaciones en Puno, Cusco, Madre de Dios y Arequipa en protesta a este acuerdo energético que es visto con desconfianza por las organizaciones sociales y ambientalistas.
Organizaciones gremiales, la sociedad civil y el Comité de Lucha contra la Construcción de la Hidroeléctrica de Inambari y la exportación del gas de Camisea de Madre de Dios realizan desde el día 17 de junio un paro de 48 horas en defensa de los recursos naturales.
Desde las cero horas los pobladores de Cusco, Arequipa, Puno, Tacna, Madre de Dios y Apurímac responden a la indiferencia gubernamental con el bloqueo de vías, suspensión del transporte urbano e interprovincial, actividades académicas y comerciales.
Hasta el momento de la firma del acuerdo el Ejecutivo peruano no promulgaba la Ley de Consulta Previa aprobada por el Congreso que obliga al Estado tal y como establece el Convenio 169 de la OIT a consultar a las comunidades indígenas antes de otorgar en concesión un proyecto que las afecte. Esto incluye acuerdos energéticos.
Para la congresista Gloria Ramos, miembro de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos del Congreso "hay un cálculo político para no aprobar la ley de consulta previa".
"Con la firma del convenio con Brasil se demuestra que seguimos con la lógica que causó el Baguazo" expresó Ramos. "Me parece inaudito que se firme el acuerdo energético con Brasil sin tener cuenta los derechos de los pueblos originarios", refirió.
Acuerdo debe ser aprobado en el Congreso
Para el congresista Yonhy Lescano y César Gamboa, del Programa de Energía Sostenible de la asociación DAR, el acuerdo energético debe ser aprobado por el Congreso por mandato de la Constitución Política.
Lescano anunció que propondrá una moción para que Ministro de Energía y Minas acuda al pleno para explicar este importante acuerdo. Sin embargo, detalló que esto sería para la próxima legislatura.
En referencia a la central hidroeléctrica Inambari Lescano señaló que "inundará 46 mil hectáreas, convirtiéndose en la más extensa de Perú y la quinta más grande de América, inundando además un importante tramo de la carretera interoceánica”.
Lescano indicó que “para su construcción tres mil cuatrocientos personas que habitan centros poblados de los departamentos de Puno, Madre y Cusco tendrían que ser desplazadas, lo que supone un grave impacto social y ambiental”.
Conflictos a la vista
Otra de las centrales hidroeléctricas que se construirían en el marco del acuerdo energético recién suscrito sería la de Pakitsapango, en el distrito de Junín.
A través de una resolución, el Ministerio de Energía y Minas ya ha autorizado a una empresa a realizar los estudios de factibilidad necesarios para iniciar este proyecto.
Para el pueblo Asháninka que habita el área concesionada, Pakitsapango (Casa del Águila) es un territorio sagrado.
"La concesión se superpone al territorio de diez de nuestras comunidades nativas (...) y fue otorgada sin informarnos ni consultarnos" denunció la Central Ashaninka del Río Ene (CARE).
El proyecto nos coloca "en una situación de vulnerabilidad" y demuestra la falta de respeto del gobierno peruano hacia nuestra forma de vida y nuestros derechos" indicó dicha organización.