Conmemorando el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI), instancia de articulación y representación regional de las organizaciones nacionales indígenas andinas de Ecuador, Colombia, Perú, Bolivia, Chile y Argentina, expresamos al mundo:
Nosotros, los pueblos indígenas no creemos que sea una fecha para celebrar, sino para reflexionar y reafirmar nuestras luchas por la vigencia de nuestros derechos. No podemos festejar los 515 años de colonización y exclusión que vivimos.
Recordamos a los Estados nacionales, a la Iglesia Católica, y a la propia Naciones Unidas, y a la Comunidad Internacional, que existe una deuda histórica con los Pueblos Indígenas, por el saqueo, genocidio y destrucción que sufrimos durante cientos de años, sin ningún tipo de reparación, por el contrario, los actuales acuerdos económicos permiten la invasión de las empresas multinacionales a nuestros territorios violentando nuestros derechos, haciendo que la deuda sea aun más.
Denunciamos la permanente violación de los derechos humanos a los pueblos indígenas, no podemos callar frente a los crímenes horrendos que vienen ocurriendo con nuestros hermanos y hermanas indígenas, de parte de las fuerzas armadas y los Gobiernos Nacionales a través de las políticas de Estado y las leyes, que están hechas para violentar nuestros derechos colectivos, al perseguirnos, al contaminar nuestros territorios, y desplazarnos con la intención de exterminarnos sistemáticamente.
Rechazamos los acuerdos económicos, como son los tratados de libre comercio (TLC) que vienen suscribiendo sin consultar, acuerdos económicos que favorecerán las inversiones multinacionales, para explotar sus recursos naturales como los minerales, gas, petróleo y la biodiversidad, afectando nuestra cultura, economía y modo de vida y apropiándose de nuestros conocimientos colectivos y poniendo en peligro nuestra existencia. Esta situación no hace más que reproducir el saqueo que sufrieron nuestros ancestros con la llegada de los invasores y colonizadores, ahora el saqueo es a nuestros recursos naturales y el agua.
Repudiamos los procesos de militarización y persecución que vienen asumiendo los gobiernos nacionales, con cambios de las leyes para perseguir a los líderes indígenas que defienden sus territorios y los recursos naturales. Es alarmante el asesinato permanente de dirigentes y líderes sociales e indígenas, el encarcelamiento injustificado y la criminalización de los movimientos sociales, todo esto nos demuestra que no existe libertad, ni derecho a decidir nuestro modelo de desarrollo. Seguimos siendo tratados como inferiores de los funcionarios del Estado que imponen un modelo económico producto de políticas de estados desarrollados y organismos multinacionales.
Respaldamos los cambios constitucionales que vienen implementando en países hermanos de Bolivia y Ecuador, que son procesos de construcción de un Estado Plurinacional, con la participación de los pueblos indígenas, por ello demandamos crear institucionalidad verdadera desde los gobiernos.
Los pueblos indígenas no somos folklore de la democracia, ni complemento del paisaje, somos actores políticos descendientes de una gran civilización y nos proponemos cambiar el sistema desde su concepción y estructura, por eso somos los actores de la transformación de los Estados, sólo así garantizaremos nuestra inclusión en ellos y seguiremos avanzando en el fortalecimiento de nuestros estados.
Es momento de construir el cambio, un cambio que se geste desde los pueblos indígenas, por tanto demandamos la construcción de estados incluyentes para todos y todas, estados plurinacionales, pluriculturales, tal como somos en la realidad y bajo los principios de equidad, solidaridad, justicia y sobre todo una democracia participativa, con el ejercicio pleno de nuestros derechos como el autogobierno comunal, la autonomía territorial consagrados en las constituciones nacionales.
Es nuestro reto construir una Patria Grande, uniendo los estados nacionales en una Comunidad Sudamericana como fue el Abya Yala, donde constituyamos un nuevo contrato social que involucre los derechos de todos y para todos, por eso planteamos una refundación y no los estados nación sumidos en la corrupción y la deuda. Es vital iniciar este proceso en todos los Estados de Latinoamérica sin excluir a nadie. Hacemos un llamado al mundo a solidarizarse y pronunciarse por el respecto a los derechos de los pueblos indígenas, y llamamos a los gobiernos de los presidente Álvaro Uribe (Colombia), Michelle Bachelet (Chile) y Alan García Pérez (Perú), para que cesen las hostilizaciones a los pueblos indígenas, las persecuciones a los dirigentes, y no continúe la criminalización, ni persecución, porque es derecho de todo ser humano y que se cumpla el convenio Nº 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), así como defender su territorio ancestral.
Denunciamos a los estados miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA), dado que no es posible que después de 20 años de debates y discusiones en las Naciones Unidas no se pueda aprobar la Declaración de los derechos de los Pueblos Indígenas, y exigimos a nuestros estados nacionales miembros de estas entidades el cumplimiento de los acuerdos por el Decenio de los Pueblos Indígenas.
Por estas razones:
Convocamos a la Movilización Continental de los Pueblos Indígenas para el día 12 de octubre, para rechazar la invasión del territorio y el saqueo, la contaminación y la persecución a nuestros lideres y autoridades y dirigentes de los pueblos indígenas, que venimos sufriendo desde hace más de 500 años, y que en pleno siglo XXI se viene repitiendo bajo otras formas y mecanismos, pero con el mismo pensamiento e ideología colonizadora.
¡Jallalla pueblos indígenas!
¡Kausakum pueblos indígenas!
Miguel Palacín Quispe
Coordinador General
Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas CAOI
CONACAMI, ECUARUNARI, CONAMAQ, ONIC, CITEM, ONPIA