Arnulfo Verón: La muerte de chicos guaraníes marca "fallas" del Estado. El director de Asuntos Guaraníes dijo que "el Gobierno debe ser autocrítico y cada uno tiene que asumir su responsabilidad". Desde Nación dijeron que se duplicaron los fondos del plan Salud Indígena para Misiones.
Posadas. La muerte de 17 chicos guaraníes en dos meses reavivó la polémica entre la Dirección de Asuntos Guaraníes y el Programa de Salud Indígena dependiente del Ministerio de Salud Pública de Misiones por el compromiso de ambos organismos en atender a los pueblos originarios que se hallan en territorio provincial.
Los desenlaces fatales continúan, a pesar que a principios de año el Programa Salud Indígena recibió más fondos para su ejecución, según la ex directora a nivel nacional, Julieta Jaime.
Esto es responsabilidad compartida con todas las instituciones del Estado, cada muerte muestra a las claras que hay problemas en la contención y prevención. Cada muerte de un niño mbyá es una situación gravísima para el Estado, porque algo sucedió, algo falló en las políticas de Gobierno. No hay que buscar justificativos, la muerte se dio en un niño que tenía una enfermedad que se podría haber evitado. La frase le corresponde a Arnulfo Verón, director de Asuntos Guaraníes, quien confirmó que el último fallecimiento registrado fue el viernes en la comunidad Leoni Poty, en el municipio de Puerto Leoni, y se trató de un mbya de siete meses.
En dos meses 17 chicos guaraníes murieron a causa de enfermedades respiratorias o bien por desnutrición. El dato no es menor, teniendo en cuenta que esas dolencias pueden ser tratadas evitando consecuencias fatales. A ello se suma que actualmente hay trece niños internados en diferentes hospitales de la provincia (Posadas, Oberá, San Vicente, Puerto Rico) por neumonía o bajo peso y otros tres adultos, de los cuales dos tienen síntomas de tuberculosis.
El Consejo de Ancianos y Consejo de Caciques se autoconvocó ayer en asamblea en las tierras de Santa Ana Miní para conversar y proponer al gobernador Carlos Rovira una política intercultural que incluya también a la medicina blanca. Unos 4.800 guaraníes habitan la tierra colorada.
El caso de los hermanitos Julián y Agustín Acuña marcó el inicio de un ciclo inédito de muertes evitables. La complejidad de esto no nos debe paralizar sino que tenemos que ser autocríticos y cada uno debe asumir la cuota de responsabilidad que me compete, dijo Verón.
Según el funcionario, el pequeño que falleció el pasado viernes fue el ejemplo más sólido para dar cuenta de las falencias en las acciones que encara el Estado.
Un bebé de siete meses murió, cuyo padre cobra 1.200 pesos mensuales, que pertenece a Leoni, ni siquiera a una comunidad rural sino urbana. Tenía (el padre) responsabilidad como agente educativo y responsabilidad de ser modelo para la comunidad. Su hijo de siete meses se murió estando a mil metros de una unidad de atención primaria de la salud, y a menos de siete kilómetros de un hospital de mediana complejidad en Jardín América, habiendo agentes sanitarios y una red consolidada... evidentemente tenemos que replantearnos lo que sucede, contó.
Si bien hace tiempo se conformó un equipo multidisciplinario con técnicos de Salud Pública, Asuntos Guaraníes, Ecología, Policía y Gendarmería, para combatir la problemática todavía no lograron frenar la fatalidad. Críticas al sistema El Programa de Apoyo Nacional de Acciones Humanitarias para las Poblaciones Indígenas (Anahi), más conocido como Programa de Salud Indígena, tiene la misión de capacitar a los agentes sanitarios para que atiendan a una determinada población. La idea es que el promotor se convierta es el nexo directo entre el mbya y el sistema de salud.
Este plan, que contempla becas de 345 pesos para cada agente sanitario, además de Misiones es aplicado por el Ministerio de Salud de la Nación en Chaco, Formosa, Jujuy, Salta y Tucumán.
El año pasado, un informe oficial realizado a nivel nacional había advertido que el 57 % de los niños aborígenes de Misiones padecen graves problemas de alimentación. Además, de las 75 comunidades, el 40 % no está documentado, el 60 % es analfabeto y de los casos mal alimentados, el 43 % padece desnutrición crónica.
Hay cuestiones que deben replantearse pero del lado de lo ancestral. Tenemos que prever y pensar en médicos comunitarios, pensar que va a pasar en el verano con el calor, falta de agua y posibilidad de aguas contaminadas. Eso es prevención. Todas las instituciones del Estado deben trabajar en campo. Si ha habido desidia, desatención hay que denunciarlo.
Luego de lanzar fuertes críticas hacia el sistema aclaró: esto no es contra nadie sino a favor de la vida.
Perspectiva desde afuera
Julieta Jaime fue la directora a nivel nacional durante un año del Programa de Salud Indígena implementado en Misiones, Chaco, Formosa, Salta, Tucumán y Jujuy. Si bien renunció a sus funciones recientemente por motivos personales, aseguró que antes de terminar su gestión se duplicó la cantidad de fondos para Misiones, ya sea para realizar más capacitación o bien para incorporar más agentes sanitarios.
"En Misiones se les dio más fondos para capacitación, en el último año se duplicó el presupuesto, realmente me sorprende muchísimo lo que está pasando", le señaló a El Territorio la ex funcionaria, que estuvo recorriendo la provincia a principios de este año.
Fuente: www.ecoportal.net, El Territorio, Jueves 10 de Agosto de 2006