Servindi, 20 de julio, 2009.- El especialista español Juan Moles alertó sobre la posible desaparición de las lenguas originarias quechua y el aymara debido a la escasa transmisión intergeneracional dentro del núcleo familiar de los pueblos y comunidades indígenas. (Imagen: Los andes)
"Hay una ley sagrada para todas las lenguas; si se rompe la transmisión intergeneracional de las lenguas, no tienen futuro, eso significa que los abuelos dejan de hablar con los padres y con los nietos, eso es lo que ha pasado en el caso de las lenguas quechua y aymara", señaló el especialista catalán.
"Lo he visto en Huaraz, Ayacucho, Cusco, Lima, Puno y digamos que se trata de un proceso muy avanzado. Por primera vez en toda la historia del quechua vamos a tener una generación enorme de escuelas en las que no se hablan ni el quechua ni el aymara.
En ese sentido, recordó el informe emitido por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) que anteriormente advirtió este problema en esta parte del país, el cual afecta a las zonas altoandinas de Perú y Bolivia.
"Creo que el pronóstico de la UNESCO es cierto y probablemente en el año 2100 habrá una bolsa muy residual de personas hablantes del quechua y del aimara", puntualizó.
De otro lado, consideró que el Proyecto Educativo Regional (PER)Â que el departamento de Puno tiene previsto implementar para contrarrestar la desaparición de ambas lenguas, "tiene muchas falencias, digamos muchas debilidades".
Finalmente recomendó a las autoridades puneñas realizar una revisión de dicho plan a fin de obtener los resultados esperados durante su implementación.