Servindi, 29 de agosto, 2022.- La gran mayoría de comuneros/as de San Juan Bautista de Catacaos desbarató las intenciones de los directivos de la comunidad de aprobar facultades para transferir tierras comunales a manos de terceros.
La asamblea convocada para las 9 a. m. del domingo 28 de agosto tenía dos temas de agenda: a) Informe de la junta directiva, y b) Otorgamiento de poder para transferir tierras.
Pero la asamblea terminó sin acuerdos debido a que la mesa se retiró y abandonó la sesión en medio de la protesta generalizada de los comuneros quienes reaccionaron con indignación.
Cabe destacar que desde las primeras horas de la mañana decenas de ómnibus de las empresas de la uva trasladaron a cerca de 350 jóvenes, presuntamente trabajadores, para que participen de la asamblea.
Esto fue un hecho extraño debido a que usualmente los comuneros que asisten a las asambleas ordinarias suelen ser personas mayores de edad. Obviamente, a este caos contribuyò la ausencia de un padrón comunal actualizado.
Desde el inicio los/as comuneros/as observaron el parcializado manejo del presidente José Clemente Namuche Albines y el secretario Manuel Segundo Silva Castillo quienes mal asesorados por Antero Juarez Iman, abogado de la comunidad, intentaron manipular la decisión de la asamblea.
El Colectivo Central de Comuneros de Catacaos incluso indica que habría una presunta organización criminal en la forma de proceder de parte del abogado y los directivos, con el apoyo de las empresas beneficiadas por transferencias irregulares realizadas por anteriores dirigencias.
Las empresas agroexportadoras serían Fegurri, Santa Regina, San José y Defrusa, conectadas a la Asociación Civil San Juan Bautista, vinculada al Sodalicio de Vida Cristiana, según un reporte de Wayka.
El director de debates José Sandoval en lugar de ejercer un rol neutral tomó abierto partido a favor de la dirigencia, puntualiza un reporte de Jorge Luis Quintana Litano publicado en su cuenta de Facebook.
La mayoria de los oradores cuestionaron el informe del presidente y se le increpó con documentos en la mano que el asesor legal y los directivos estaban vinculados al trafico de tierras.
Ellos otorgaban certificados de posesión a personas extrañas a la comunidad y los/as comuneros/as clamaban que no debía otorgarse poderes dado que con este instrumento se habían transferido entre 70 y 90 mil has. desde 1998.
Tras finalizar el debate sobre el primer punto de agenda el director de debate preguntó a los asistentes si les daban poderes o facultades para la transferencia o ventas de las tierras comunales.
Las personas trasladadas por los buses de las empresas agroexportadoras levantan la mano, otros levantaban las dos manos, pero la gran mayoría de “verdaderos comuneros con el vaivén de sus dos manos, negaban darle la facultad solicitada” reportan diversas fuentes locales.
Ante la inexperiencia del director de debates se genera una caos en la mesa donde se encontraban el asesor legal, el presidente de la comunidad y el secretario de actas, quienes ante el desorden se retiran al segundo piso sin ninguna explicación.
La convocatoria de la asamblea convocada para el mediodía para tratar el tema sobre facultades para cobrar cheques y otros, no se desarrolló debido a que los miembros de la mesa no retornaron a la reunión.
Ante tales circunstancias la mayoría de comuneros/as decide declarar nula toda la asamblea general mal conducida por José Sandoval, quien salió resguardado por efectivos policiales.
Los trabajadores movilizados por las empresas transnacionales dedicadas a la producción de uva hicieron cola para recibir su almuerzo, lo que confirma que eran dirigidos y servían a los intereses de las empresas que los movilizaron.
Cabe destacar la ejemplar participación de los/as comuneros/as de Yapato y Los Tablazos quienes asistieron masivamente con la consigna de no darle poder a los directivos.
Asimismo, la actitud persuasiva de los participantes que convencieron a los indecisos de no otorgar facultades a una directiva que está por vencer su mandato y cuyo propósito principal es lucrar con transferir tierras a costa del desmembramiento de la comunidad.
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