FAO llama a detener la salinización de los suelos

Como parte del Día Mundial del Suelo, la FAO impulsa campaña para enfrentar su salinización y aumentar la productividad.

Servindi, 5 de diciembre, 2021.- La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO) impulsa una campaña para detener la salinización de los suelos y aumentar su productividad.

En el marco del Día Mundial del Suelo, la organización recuerda que la salinización de estos ecosistemas se presenta como uno de los principales obstáculos para la seguridad alimentaria y la protección de la biodiversidad.

Frente a los problemas de salinidad, la gestión sostenible de los suelos es fundamental para el desarrollo de la agricultura, la purificación del agua y para enfrentar el cambio climático.

Problema de fondo

Los suelos con problemas de salinización afectan la producción agrícola, ya que las altas concentraciones de sales solubles o iones de sodio generan impactos en el agua superficial, el desarrollo de los cultivos y la misma calidad del suelo.

Según cifras de la FAO, a la actualidad, existen más de 833 millones de hectáreas de suelos que enfrentas problemas de salinidad y sodicidad en todo el mundo.

La salinización y la sodificación de los suelos se encuentran entre las amenazas mundiales más graves tanto para las regiones áridas y semiáridas, como para las tierras de cultivo en las regiones costeras, señala el organismo. 

Causas de la salinidad

Como detalla el ‘Mapeo de suelos afectados por salinidad’ realizado por la FAO, existen dos tipos de causas en los problemas de salinidad de los suelos.

Mientras que las primarias están relacionadas a fuentes naturales, las secundarias están estrechamente relacionadas con la intervención humana.

En primer lugar, se tiene a la influencia del clima, al agua subterránea, al material parental salino o a los depósitos de sal arrastrados por el viento como causantes naturales de la salinidad.

Estos factores se ven exacerbados por la actividad humana a través de la irrigación, la aplicación inapropiada de fertilizantes, la eliminación inadecuada de residuos o el uso inadecuado de aguas residuales.

Clasificaciones

Asimismo, el documento de la FAO, señala que, según los tipos de sal y la intensidad de su afectación, los suelos con problemas de salinidad tienen tres clasificaciones.

Suelos sódicos: alto contenido de iones de sodio. Presentan dispersión de arcilla y materia orgánica en las superficies, factor que le otorga un aspecto negro parduzco al suelo. La infiltración del agua en el suelo puede bloquearse, por lo que presentan anegaciones luego de lluvia o irrigación.

Suelos salinos: preponderancia de iones de cloruro y sulfato. Presentan masas coaguladas (floculación) de arcilla y un color blanco parduzco. Algunos de estos suelos tienen yeso y cal.

Salino-sódicos: alto contenido de iones solubles y de iones de sodio. Sus características se asemejan a los suelos salinos o sódicos de acuerdo a las variaciones de sus componentes.

Amenazas humanas

La publicación ‘State of knowledge of soil biodiversity’, publicado por la FAO a fines del 2020, da luces sobre el estado, los retos y las potencialidades de los suelos.

La biodiversidad de los suelos no solo tiene relación con la agricultura, también está vinculada con la salud de las personas y la protección del medio ambiente frente a la emergencia climática.

La salinización es una de las múltiples amenazas a la biodiversidad de los suelos generadas por la acción humana. Como señala el documento de la FAO, hay otras causas.

Las actividades relacionadas a la deforestación (como el cambio del uso de la tierra o la alteración en las propiedades del suelo) producen la pérdida de especies y genera impactos en la diversidad del suelo que toma décadas en recuperarse.

De igual forma, la agricultura intensiva (que conlleva a un gran uso de pesticidas y fertilizantes, cambian la estructura de los suelos o alteran los ciclos hidrológicos) reducen la biodiversidad y nutrientes de estos ecosistemas.

Asimismo, la acidificación (generada por una inadecuada fertilización, la contaminación o cambios en las plantaciones) altera el ambiente y la alimentación de los microorganismos.

La polución (plasmada en la presencia de microplásticos, pesticidas o el uso de aguas) también conlleva consecuencias como la toxicidad del conjunto de organismos en el suelo.

Por otro lado, la creciente urbanización representa otro de los graves problemas generados por la acción humana para la biodiversidad de los suelos.

Estos problemas de origen antropogénico demuestran la necesidad de generar conciencia en la población sobre la importancia de la conservación de los suelos y sus ecosistemas.

Conmemoración

Como se recuerda, la Unión Internacional de Ciencias del Suelo (IUSS) impulsó la creación de esta fecha conmemorativa desde el 2002, para llamar la atención sobre la necesidad de la gestión sostenible de estos ecosistemas.

La medida se aprobó en 2013, durante la 68° Asamblea General de la ONU, en reconocimiento de que la sostenibilidad de los suelos es fundamental para promover ecosistemas estables y la seguridad alimentaria.

Desde el año 2014, el Día Mundial del Suelo se celebra cada 5 de diciembre, en coincidencia con la fecha de nacimiento Bhumibol Adulyadej, fallecido monarca de Tailandia promotor de esta iniciativa.

Eventos

Como parte de las actividades por la fecha, la Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe, organizaron un evento virtual sobre la gestión sostenible del suelo en la región

Día 1

Día 2

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