Servindi, 23 de abril de 2021.- Desde hace un mes, indígenas de pueblos nahuas permanecen en un plantón alrededor de la planta embotelladora de la empresa Bonafont, ubicada en la carretera México-Puebla.
Acusan a la empresa de saquear diariamente 1 millón 641 mil litros de agua desde su instalación en 1992, dañando sus fuentes de agua y dificultando sus actividades agrícolas y de autoempleo.
Ante la situación, representantes nahuas se reunieron este 21 de abril en el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), donde anunciaron que no permitirán que Bonafont vuelva a operar.
“Los Pueblos Nahuas Unidos de la región Cholulteca y de los Volcanes al día de hoy hemos liberado 50 millones 871 mil litros de agua que retornaran libres a nuestros mantos acuíferos…”, expresaron.
Foto: Karen Castillo / Somos el medio
Intento de solución
Este 22 de abril, la secretaria de Gobernación de Puebla señaló que el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) verificará que Bonafont pueda funcionar en el municipio de Juan C. Bonilla.
Ello sería una medida para solucionar el conflicto con los habitantes, informó el diario 24 horas.
Para eso se supervisará que cuente con todos los permisos necesarios. Actualmente solo tiene la autorización de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
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Al menos 105 comunidades indígenas de México resultaron afectadas por el impacto que causa en sus territorios la industria energética y otros proyectos.#DerechosColectivosVulnerados pic.twitter.com/Z6PewovTMS
— Servindi (@Servindi) January 14, 2021
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