Foto: ANF
Servindi, 9 de enero, 2013.- El Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ) rechazó, como lo hizo antes la CIDOB, el informe elaborado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) sobre la consulta realizada en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
El martes en conferencia de prensa el Jiliri Apu Mallku del Conamaq Tata Félix Becerra y el Mallku Simón Cruz sostuvieron que el gobierno no ha cumplido con los procedimientos constitucionales y las normas internacionales sobre la consulta como que sea previa e informada.
Es por ello que han manifestado que la consulta no tiene validez y anunciaron que a través de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI) trabajan en la articulación de los pueblos para iniciar una demanda internacional junto a su par de la cuenca amazónica, la COICA.
En otro momento exigieron el cambio total del gabinete ministerial para instalar uno de carácter Plurinacional, con participación de representantes de los pueblos indígenas originarios elegidas por sus organizaciones matrices de manera orgánica.
Como se recuerda la mañana del lunes el TSE hizo público el informe sobre la consulta que se llevó a cabo entre el 29 de julio y el 7 de diciembre en el TIPNIS. Según este organismo 58 de las 69 comunidades se expresaron a favor de la contrucción de una carretera por medio del parque ecológico.
Lo que no dice el informe del TSE
La Iglesia Católica y la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB), acompañadas por la Federación Internacional de los Derechos Humanos (FIDH), conformaron una Comisión Interinstitucional que visitó 36 comunidades del TIPNIS entre el 29 de noviembre y el 13 de diciembre de 2012.
La Comisión dio cuenta de La consulta del Gobierno fue precedida y acompañada por regalos, prebendas y promesas de desarrollo y servicios que condicionaron los criterios de "libre" y "buena fe".
Asimismo que la consulta giró en torno a la disyuntiva "intangibilidad o desarrollo", presentando la intangibilidad como la imposibilidad de utilizar cualquier recurso natural del TIPNIS para la subsistencia de las familias indígenas.
Recalcó además que de las 36 comunidades visitadas 30 expresaron su rechazo a la construcción de la vía, tres condicionaros su construcción a estudios y al cambio de ruta de la misma y tres aceptaron su edificación sin mayores reparos.
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