IWGIA, Dourados, 5 de abril de 2006.- En la noche del 2 de abril pasado, la opinión pública brasilera quedó conmocionada ante la muerte de dos policías y las graves heridas de un tercer policial en manos de indígenas guarani-kaiowas de Porto Cambira, Municipio Dourados. Esta situación generó una fuerte condena y amenazas contra esta comunidad indígena. Pero, de acuerdo a los dirigentes indígenas, es necesario esclarecer los hechos ocurridos, pues Porto Cambira tiene una historia particular.
Antecedentes
La región Mato Grosso do Sul, fue considerada en las ultimas décadas como una de las áreas de mayor brutalidad contra los pueblos indígenas. Decenas de indígenas fueron asesinados o sufrieron situaciones de violencia.
Porto Cambira cumplió en el año 2003, todos los pasos de la legalización de su territorio, faltando solo la firma del Presidente de la Nación. Asimismo fueron expulsados pocos meses más tarde por una determinación del Tribunal Superior Federal, para un campamento provisorio alrededor de sus tierras tradicionales. Estos campamentos no reúnen las más mínimas condiciones sanitarias y han sido objeto constante y fuertes tensiones entre los terratenientes de la zona y los indígenas.
En el día sábado 1 de abril, la tensión en el campamento tomó consecuencias trágicas. Al final de la tarde, llegó al campamento un automóvil con vidrios polarizados, sin identificación, con tres personas de civil armadas, quienes procuraban a un individuo no indígena, que aparentemente se escondía en este campamento. Los indígenas, con los antecedentes de amenazas por parte de personas contratadas por terratenientes, quedaron atemorizados y se enfrentaron a estas tres personas, resultando en la muerte de dos de ellos y las graves heridas de la tercera de estas. Posteriormente se supo que estas personas eran personal policial.
Hay que señalar que de acuerdo a las leyes brasileras, solo puede ingresar en tierras indígenas la Policía Federal, acompañados por la Fundación Nacional del Indio, FUNAI. Todo indica que las disposiciones legales no fueron observadas por los policías de civil que entraron en el área indígena.
A partir de la muerte de estos dos policías, se desató una fuerte campaña desde los medios de difusión contra los indígenas guarani-kaiowas, que se sientes amenazados por la población de la ciudad de Dourados de Mato Grosso do Sul. Seis indígenas fueron detenidos y se acusa públicamente al cacique guarani Carlito de Oliveira como el instigador del conflicto. La prensa de Mato Grosso do Sul calificó a los indígenas como bichos irracionales y el periodista Gino Ferreira, del periódico Dourados News, declara sin ninguna sustentación que, el dirigente Carlito de Oliveira es un especialista en invasión de tierras y tiene cobertura para actuar de esta manera, induciendo al público a pensar que este líder es una persona violenta.
Una representante de la asociación de la Asociación de Jóvenes indígenas de la Reserva de Dourados (AJI), Micheli Alves Machado en mi opinión, los indígenas se defendieron ante la invasión pues ya viven en un lugar de extrema tensión. Muchos de los indígenas ya fueron muertos en manos de policías y nadie reaccionó. La prensa casi nunca publica la violencia contra los indios y mucho menos se tomó medidas contra los agresores.
De acuerdo a la Comisión Indígena Misionera, CIMI, se creó en torno de este hecho, un estado de conmoción que ciertamente estimulara el preconcepto, la discriminación y el odio, alimentado contra estos pueblos desde hace siglos. Y una de las consecuencias más inmediatas será la utilización de este hecho contra las luchas por sus derechos, especialmente el de la tierra.
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Brazil: More violence in the State of Mato Grosso do Sul
Dourados, 5th of April 2006, by IWGIA.- In the night of last April 2nd the Brazilian public opinion was shocked because of the death of two policemen and the serious wounds of a third policman at the hands of indigenous guaraní-kaiowa from Porto Cambira, Municipality of Dourados. This situation gave rise to severe condemnations and threads against this indigenous community. But, according to the indigenous leaders, it is necessary to clarify the ocurred incident, since Porto Cambira has a special history.
Background
The Mato Grosso do Sul region has in the last decades been considered as one of the areas with major brutality against the indigenous peoples. Dozens of indigenous people were murdered or were affected by violence situations.
Porto Cambira fulfilled in the year 2003 all the steps for the legalization of their territory, only missing the signature of the nations president. A few month later, they were, by a decision of the Federal High Court, also expelled to a provisional camp around their traditional territory. These camps don't fulfill the most basic sanitary conditions and they have been a constant object of strong tensions between the landowners of the zone and the indigenous people.
On saturday the 1st of April, the tension in the camp had tragic consequences. At the end of the afternoon, a car with polarized window glass, without identification, arrived at the camp, with three armed individuals in plain clothes who were looking for a non-indigenous person who apparently was hiding in this camp. The indigenous people, having experienced previous threats from people hired by landowners, were frightend and they faced these three individuals, resulting in the death of two of them and the serious wounds of the third of them. Later it was known that these persons were policemen.
There has to be pointed out that, according to the Brazilian laws, the Federal Policy is only allowed to enter the indigenous territory when accompanied by the National Indian Foundation, FUNAI. Everything indicates that the legal resolution was not noticed by the policemen in plain clothes who entered the indigenous area.
Since the death of the two policemen, the media has unleashed a strong campaign against the indigenous guaraní-kaiowa, who feel threatend by the population of the city of Dourados in Mato Grosso do Sul. Six indigenous persons were arrested and the guaraní chief Carlito de Oliveira is publicly accused of being the instigator of the conflict. The press of Mato Grosso do Sul described the indigenous people as irrational bugs and the journalist Gino Ferreira from the Dourados News newspaper declared without any foundation that the leader Carlito de Oliveira is a specialist in invading land and he is covered to act like this, leading the readership to think that this leader is a violent person.
A representative of the association Association of Young Indigenous People of the Dourados Reservation (AJI), Micheli Alves Machado: in my opinion, the indigenous people were defending themselves towards the invasion, since they already live in a place with great tension. Already many of the indigenous people have been killed by policemen and nobody reacted. The press hardly ever publishes the violence against the natives and even less are the measures taken against the aggressors.
According to the Indigenous Missionary Committee (CIMI), there was created a state of commotion about this incident, which certainly will encourage the prejudice, the discrimination and the hate, kept alive against those peoples for many centuries. And one of the most immediate consecuences will be the use of this incident against the fight for their rights, especially the right for their territory.
Comentarios
Cuando son los indigenas quienes defienden sus derechos somos considerados con epitetos de irracionales, salvajes, etc., pero cuando somos atacados la prensa nunca se pronuncia.
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