Imagen: Astrid Carreño/El Siglo
Servindi, 8 de mayo, 2015.- Indígenas Ngäbe-Buglé rechazaron la propuesta del Gobierno de continuar con el polémico proyecto hidroeléctrico Barro Blanco bajo la administración de una nueva empresa. Aceptaron instalar una mesa técnica para continuar con el diálogo.
Como se recuerda, el pasado 4 de mayo, la Presidencia de la República de Panamá anunció que la empresa Generadora del Istmo S.A. (Genisa) ya no llevará a cabo el referido proyecto cuya concesión fue aprobada en 2007.
La decisión, tomada en el marco del proceso de diálogo establecido entre representantes de las comunidades indígenas afectadas y una delegación oficial, fue rechazada por la agrupación comunitaria indígena Movimiento 10 de abril (M-10).
A través de un comunicado, el citado movimiento demandó la cancelación definitiva del proyecto y que este no sea continuado por ninguna otra empresa.
En el pronunciamiento suscrito por Manolo Miranda, del M-10; la cacica general Silvia Carrera, la diputada del circuito 12-3 Crescencia Prado y otras autoridades locales, se solicitó que el conflicto sea manejado por la Comisión Indígena liderada por las autoridades tradicionales y administrativas, así como las comunidades afectadas.
Por su parte, el alcalde de Müna, distrito indígena que será afectado por el proyecto, extendió una invitación a las organizaciones opositoras a la hidroeléctrica a reunirse el próximo 10 de mayo, para acordar efectivas medidas de presión hacia el Gobierno.
Al término de la reunión entre las partes, el pasado 4 de mayo, la representación indígena aceptó formar parte de una mesa técnica para debatir varios aspectos del proyecto que se realizaría en quince días. Sin embargo, la cacica Carrera dejó en claro que su posición definitiva es la cancelación de la hidroeléctrica.
Discrepancia entre indígenas
El presidente del Congreso Nacional Ngäbe-Buglé, Edilberto Sánchez, se manifestó en contra de la cancelación del proyecto.
Adujo que, según la Ley N° 10 de marzo de 1997, su organización es el ente tradicional al cual le corresponde resolver el conflicto.
En ese sentido cuestionó que la comisión gubernamental se haya reunido con la cacica Carrera y otras organizaciones para las negociaciones por Barro Blanco.
En respuesta a Sánchez, la cacica Carrera acusó al dirigente de haber impuesto a Genaro Smith como cacique. “Yo soy la cacique hasta el 2017”, aseguró la lideresa.
El proyecto Barro Blanco
El proyecto hidroeléctrico Barro Blanco, convertido en motivo de tensas discusiones desde el año 2011, represará el río Tabasará, lugar sagrado para los habitantes de la comarca Ngäbe-Buglé, quienes viven en las riberas del mismo.
Pese a que la figura jurídica de comarca reconoce el derecho de propiedad de los indígenas, la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP) ordenó el desalojo de los indígenas del lugar.
Con el avance de las obras, al 95 por ciento, se hace más evidente la tala, quema y destrucción de la biodiversidad de esta región de la comarca indígena.
Comentarios
He aquí la diferencia con el otro artículo comentado sobre dirigentes y masa:
"se solicitó que el conflicto sea manejado por la Comisión Indígena liderada por las autoridades tradicionales y administrativas, así como las comunidades afectadas".
El autor del otro artículo no contribuye al conocimiento y divulgación de la autonomía comunitaria. Sus razones tendrá.
En este artículo podemos percibir la presencia de las autoridades tradicionales y de las comunidades, en el otro artículo no.
Añadir nuevo comentario