En la mesa de izquierda a derecha: Beatriz Huertas, Klaus Quicque, Luis Tayori y César Augusto Jojajé. Foto: Fenamad.
Servindi, 9 de marzo, 2015.- La Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad) inició una campaña para el reconocimiento del Corredor Territorial de Pueblos Indígenas Aislados y en Contacto Inicial Pano, Arawak y otros que abarca territorios de Madre de Dios, Cusco, Ucayali en Perú y Acre en Brasil.
Klaus Quicque Bolívar, presidente de la citada federación indígena, afirmó que la propuesta nace de la necesidad de hacer visibles a estos pueblos y lograr que el Estado reconozca este gran espacio territorial esencial para su supervivencia.
Es una obligación jurídica o moral del Estado asumir la defensa de la vida, el territorio y los saberes culturales de dichos pueblos en situación de extrema vulnerabilidad debido a la presión territorial de terceros, explicó.
En ese sentido, precisó que la campaña busca informar y sensibilizar a la ciudadanía sobre la existencia y vulnerabilidad de sus hermanos indígenas.
“No es un capricho, sino una necesidad”, dijo Klaus Quicque al fundamentar la propuesta que adquiere un alcance histórico por su proyección e importancia estratégica.
La campaña es impulsada por una plataforma de organizaciones indígenas amazónicas entre las que se encuentran la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP) y sus filiales AIDESEP-Ucayali (ORAU) y el Consejo Machiguenga del Río Urubamba (COMARU).
Asimismo, AIDESEP Atalaya (CORPIAA), la Organización Regional de los Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO) y la propia Fenamad.
"No queremos un contacto forzoso"
Quicque recordó que las primeras generaciones de contactados del pueblo harakmbut, entre los que se encuentran sus padres y abuelos, sufrieron una serie de tropelías que provocaron la muerte de miles de ellos.
“Hoy no queremos un contacto forzoso, sino que nuestros hermanos por su libre autodeterminación decidan su forma de vivir”, sostuvo ante la prensa el 2 de marzo.
Aclaró que la finalidad de la propuesta no es desaparecer las áreas naturales protegidas u otras figuras legales, sino, básicamente, reconocer y proteger de manera efectiva el corredor.
La antropóloga Beatriz Huertas hizo la exposición técnica del corredor que abarca amplios territorios de pueblos ancestrales y sobre los que hoy existen concesiones forestales, castañeras, lotes petrolíferos, entre otros.
En el corredor territorial habitan diversos pueblos en aislamiento como los Chitonahua y Mastanahua, de la familia lingüística Pano, y Mashco Piro y Matsigenka, de la familia Arawak. Asimismo, Nanti y aislados del Paquiria, también de la familia Arawak.
Además, existen otros pueblos que aún no se han identificados, pero que se han denominado según su ubicación como es el caso de los aislados del Jordão, aislados del Humaitá, aislados de Riozinho y aislados de las cabeceras de los ríos Mishagua, Manu y Las Piedras.
También están los pueblos en contacto inicial como los Pano del Xinane, Chitonahua, Mastanahua, Yora de habla Pano, los Matsigenka del Manu, Nanti y del Paquiria de habla Arawak y familias Amahuaca en contacto esporádico.
Luis Tayori, presidente del Consejo Harakmbut, Yine, Matsiguenka (COHARYIMA) y César Augusto Jojajé, dirigente de Fenamad y coordinador de los PIACI reafirmaron la necesidad del corredor.
Insistieron en que el Estado debe asumir un compromiso formal en defensa de la vida de los hermanos que decidieron aislarse de la sociedad y vivir en forma libre en medio de la naturaleza luego del genocidio sufrido durante la época del caucho, afirmaron.
Como parte de la campaña Fenamad y demás organizaciones indígenas desarrollarán estrategias legales ante los estados para lograr el reconocimiento de este Corredor Territorial donde ya se desarrollan actividades extractivas que ponen en riesgo la vida de los indígenas aislados y en contacto inicial.
Presentes en Brasil
Luego de la presentación en el Perú, se llevó a cabo en el Estado de Acre, Brasil, una reunión con organizaciones indígenas de ese país.
Durante la cita se analizó la situación de los pueblos indígenas aislados y en contacto inicial que habitan el Corredor y se trabajó en el diseño de una propuesta que será alcanzada a ambos gobiernos.
El encuentro sirvió, además, para plantear la formulación y aplicación de políticas regionales, nacionales y binacionales a fin de garantizar la protección de los derechos territoriales y socio-culturales de estos pueblos.
Representando a Brasil estuvo la Comisión Pro-Indígena de Acre, la Asociación Agroforestal de Agentes Indígenas de Acre (AMAAIAC), la Organización de Profesores Indígenas de Acre (OPIAC), entre otras organizaciones de ese país.
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