Servindi, 9 de julio, 2016.- Indígenas del pueblo Yukpta del departamento del Cesar, al noreste de Colombia, rechazan que en sus territorios ancestrales se ubique una de las zonas donde las guerrillas de las FARC harían su transición de la vida guerrillera a la civil.
Los yukpas enviaron una carta a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y al presidente de Colombia Juan Manuel Santos, donde expresan su temor de que la presencia de guerrilleros en sus tierras ocasione conflictos violentos.
Entre varios puntos, la misiva propone que el Estado realice una consulta previa para delimitar y demarcar previamente los territorios ancestrales de los Yukpas, un pueblo que se encuentra en una condición de alta vulnerabilidad.
También exigen que se realice otra consulta previa acerca del establecimiento de guerrilleros en transición a la vida civil pues consideran que el área destinada para este fin está comprendida dentro de sus territorios ancestrales.
En los diálogos de Paz llevados a cabo en Cuba entre el Gobierno de Colombia y el referido grupo armado, se acordó establecer las denominadas "Zonas Generales Transitorias Veredales de Normalización” para los guerrilleros las cuales se ubicarán en 23 veredas del país.
Una de ellas se ubicaría en La Paz, en el departamento del César, donde habitan ancestralmente unos 12,000 indígenas Yukpas, quienes han padecido los conflictos durante la época de la colonización así como la lucha armada con la guerrilla.
Los Yukpas consideran que el Gobierno cae en contradicción con dicha propuesta “puesto que la propia Corte Constitucional dijo en 2004 y en 2009 que estos indígenas (los Yukpas) están en alto peligro de extinción”, indicó al periódico El Espectador Juan Pablo Gutiérrez, de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
“Con nuestra fuerza y nuestros hombres guerreros, hace 10 años vivimos tranquilos, sin presencia ni de la guerrilla ni de los paramilitares. Después de siglos de sufrimiento logramos vivir en paz. Por nada del mundo vamos a dejar que esa guerra vuelva a nuestra tierra”, señaló la Gobernadora indígena Esneda Saavedra al referido medio.
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